—¡Hola fea! —saludó Cam con una sonrisa recargardo su barbilla en la palma de su mano. —¿Cómo estás?
—¡Hola tarado! —contesté con imitando su acción. —Estoy bien, ¿y tú?
El chico rió por unos segundos, —Estoy bien, ya quiero salir de casa. —Cam hizo un puchero haciéndome reír suavemente.
Tomé una bolsa de papas fritas y la abrí dispuesta a empezar a comer, sin embargo, Cam me miró con indignación. —¿Qué?
—Sabes que estoy a dieta y tú te pones a comer mi comida favorita frente a mi, se me hace una falta de respeto. —se quejó con un tono herido cruzándose de brazos dramáticamente.
—Tú fuiste el que decidió ponerse a dieta, yo no. —me defendí con una sonrisa victoriosa. —Ya~, no seas dramático Cam. —dije con un tono de voz dulce y con una mirada tierna.
—Ni trates de persuadirme, eh. -—Volteó a verme apuntándome con su dedo índice. —Esta vez no funcionará.
—Agh, —me quejé. —qué malo.
Cam rió burlón, y se levantó de su asiento buscando algo dejando ver que aún traía su pantalón de pijama.
—Qué hermoso pijama de navidad. —dije sarcásticamente bromeando.
—Gracias, es de diseñador. —contestó de la misma manera regresando a sentarse pero ahora con una bebida en su mano y modelando.
—¿Por qué aún te sigues poniendo la pijama de navidad? —pregunté riendo.
—Es la única que tengo. —respondió mientras trataba de abrir la bebida. —Y la única que no está rota.
—¿Tu gato las rompe? —pregunté casi afirmando, él asintió con cansancio haciéndome reír un poco.
—Es todo un caos tener un gato. —finalmente pudo abrir la bebida y tomó un sorbo de ella. —Contigo es un amor pero a mi, me odia.
—Su manera de amar es rara, acéptalo. —defendí al pobre gato.
—Claro. —dijo con ironía para finalmente reír los dos.
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Algo re random pero ya tenía ganas de actualizar uwu ¿Cómo están? Espero que bien 😳💕 Gracias por el apoyo al libro, me hacen re feliz 😔👊🏻 Gracias por leer 💖.
