Cálido y suave, así describiría el ambiente que nos rodeaba a mi y a JungKook mientras estábamos abrazados con los ojos cerrados mientras él cantaba en susurro. Nos encontrabamos en total silencio, solo se podía escuchar la lenta melodía de la canción y las gotas de agua caer sobre la ciudad.
No podía negar que en ocasiones se soltaba un aire violento contra las ventanas haciéndolas retumbar, sin embargo, el ambiente no dejaba de ser relajante.
El reloj marcaba las 11:36 de la noche, el apartamento de JungKook era grande y no estaba totalmente ordenado pero era acogedor además de que se podía oler en el aire la frangancia que él usaba diariamente combinado con el olor a tierra mojada que las plantas de fuera emanaban.
Después de unos minutos, JungKook se quedó en silencio dejando un rastro de besos cortos y húmedos sobre mis mejillas bajando lentamente hacia mi cuello para nuevamente subir y posar suavemente sus labios sobre los míos. No pasó tanto tiempo para que el menor decidiera mover sus labios de manera profunda tomando mi cintura con sus manos posicionándome arriba de él. Decidí dejar mis manos descansar sobre su pecho que subía y bajaba lentamente.
En ocasiones nos separabamos por falta de aire y volvíamos a unir nuestros labios como si fueran piezas de rompecabezas, encajaban a la perfección. Durante todo el beso, manteníamos los ojos cerrados disfrutando de los labios de cada uno, la lluvia disminuía pero no dejaba de caer de una manera fuerte y relajante.
Después de tantas caricias cálidas, nos fue suficiente para subir la intensidad del beso a uno más profundo, rápido y lleno de pasión. Sin despegar nuestros labios nos sentamos en el sofá negro para que la espalda de JungKook se recargara en el respaldo y cada una de mis piernas quedaron a cada lado del menor sentándome en su regazo.
Él bajo sus manos hasta mi cadera para reforzar su agarre y atraerme hacia su pecho, mis manos tomaban su nuca suavemente para así profundizar el beso.
El ambiente cálido que antes se sentía ahora era caliente y silencioso, que incluso podíamos escuchar los latidos de nuestros corazones sorprendentemente sincronizados.
Nada importaba en esos momentos, ni siquiera presentábamos atención al ruido de los autos y a las voces de las personas de allá fuera, en ese momentos solo éramos JungKook y yo.
Solo los dos, y nadie más.
Pasaban los segundos, minutos. No faltaba mucho para que se hicieran las 00:00 hrs y aún seguíamos manteniendo nuestros labios jugando lentamente. Pero todo tiene un fin, nos separamos y abrimos nuestros ojos encontrándonos muy cerca del otro aún en la misma posición, juntamos su frente y sonreímos.
La lluvia dejó de caer para convertirse en solo pequeñas gotas, el cielo estaba completamente oscurecido con pocas estrelladas brillando en el pero eso no quitaba la hermosura que poseía esa noche.
Es increíble como el tiempo puede pasar rápidamente pero para ti, estando con una persona especial, puede detenerse y nunca volver a correr. Porque solo estamos los dos, en un mundo que hemos creado para nosotros y nadie más.
Nuestro mundo.
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Jejeje, estaba escuchando Singularity y salió este capítulo sisisi Me sentí re extraña al escribir esto, no sé xdxd Espero les haya gustado ✌🏻💞🦋
