ꕤ ፧ Si Fueras Idol 2 ❜

𝐋𝐗𝐗𝐈𝐈

IMAGINA:

Taehyung iba caminando con un pequeño ramo de rosas, eran para ti. Sabía que no eras gran fan de las flores, pero tampoco te disgustaban.

El día era perfecto, un cielo soleado con un montón de nubes que adornaban el hermoso cielo azul, se escuchaba el cantar de los pájaros por cada árbol que había plantado en el césped del parque.

Finalmente, Taehyung llegó a la casa de Kim. Desde fuera no se escuchaba ningún ruido, era extraño ya que siempre se podían oír los gritos de JiYeon, las risas escándalosas de SaeEun, las quejas de Lean y los regaños de MidNi, mientras que Kim y Blue eran las más tranquilas del grupo. Sin dudarlo un minuto más, el chico apretó el timbre que sonó por toda la casa, pasaron unos pocos segundos para que abrieran la puerta y el castaño se encontrará con Kim, la mirada de ella al verlo era de sorpresa, felicidad y cariño. Esa mirada le encantaba a Taehyung.

-¡TaeTae! Adelante, -Kim se movió a un lado para dejar pasar a Taehyung, que camino de manera tímida hasta la sala de estar y sentarse. -¿qué haces aquí? ¿necesitas algo? -preguntó la chica amablemente sentándose frente a Taehyung.

-Toma, son para ti. -Taehyung extendió las flores hacia Kim, las tomó con delicadeza y las admiró por unos segundos con una sonrisa en su rostro. -¿Te gustan?

-Me gustan, -la chica se levantó y caminó hasta la cocina trayendo un florero de cristal con decoraciones de color verde y morado. -y ¿a qué se debe que me regales flores? La última que vez que lo hiciste fue por el día de la madre, y realmente era un regalo para mi abuela. -decías riendo mientras acomodabas las flores.

-Te salvé de un buen regaño de tu papá. -rió Taehyung. -Solo las vi en un puesto y quise traer unas.

-Son muy lindas, gracias TaeTae. -después de echarle agua al florero, Kim regresó con Taehyung colocándose a su lado.

-Kim, te quiero decir algo muy importante. -admitió el castaño atrayendo por completo la atención de la chica, esta lo miraba con curiosidad y preocupación.

-¿Qué ocurre? -preguntó Kim poniendo una mano sobre el hombro de Taehyung.

-Yo, -dio un suspiro largo. Se lamió los labios nervioso y habló. -desde hace tiempo que he tenido sentimientos por ti. Sentimientos no solo de amigos. -los dos no sabían que decir en ese momento. La chica bajó su mano y se inclinó hacia al frente. Habían entendido perfectamente a que se refería, no hacía falta explicarlo.

Kim rió sin gracia, bajó la mirada con una sonrisa y volvió a observar a Taehyung, se encontraba en silencio, se mostraba nervioso. Él sabía que esa confesión tendría varias respuestas, podría ser inesperada la reacción de Kim.

-Hace mucho tiempo me rendí, pensé que nunca llegaría este momento. -dijo Kim en voz baja, Taehyung volteó a verla rápidamente con los ojos abiertos. -En un principio, te veía solo con ojos de amor y aprecio, para mi eras la única persona que me daba fuerza para levantarme cada día y no caer. Eras esa persona especial que me hace olvidar todo lo malo, tu sonrisa, tu emoción, tu felicidad me hizo ver lo cuanto que quiero seguir a tu lado. -decía Kim con la mirada perdida y los ojos llorosos. Taehyung se acercaba lentamente, recargó su cabeza en el hombro de ella y tomó su mano, la acariciaba suavemente como si fuera una muñeca de porcelana apunto de romperse. Kim volteó a verlo y él alzó su mirada. Sus rostros qudaron a centímetros, sentían sus respiraciones pesadas y un tanto aceleradas. El castaño podía percibir como los latidos de su corazón aumentaban con velocidad gracias a los nervios que sentía, sorprendentemente le pasaba lo mismo a la chica. Millones de sensaciones recorrían el cuerpo de cada uno, no se movían ni emitían ningún ruido, solo se miraban admirando cada facción de sus rostros, cada lunar que poseían los admiraban por buen rato. El cálido ambiente del lugar los envolvió en una aura caliente pero cómoda y fresca, Taehyung se acomodó un poco mejor quedando tan cerca que sus narices se rozaban con suavidad.