Bittersweet Submission

Cap 22 (18+)

Demonios... La había embarrado en grande. No sólo por contradecirlo, sino por haber elevado mi tono de voz y para colmo llamarlo por su nombre. Cerré los ojos y suspiré con preocupación, cuando los abrí Ethan estaba a mi lado, observandome severamente. Definitivamente esta no la libraba.

-¿Sabes lo que hiciste verdad?, preguntó con furia reflejada en sus ojos

-Sí señor, respondí luego de tragar con dificultad.

-Y sabes lo que pasará entonces, afirmó

-Sí señor, volví a contestar, mientras bajaba la mirada, no podía seguir mirando el enfado en sus ojos.

-Sube a tu habitación, quítate la ropa y esperame ahí, ordenó fríamente.

Cerré los ojos con temor un segundo y luego me puse de pie y me dirigí a mi habitación rápidamente. Entre y me dejé caer sobre la puerta. Tenía miedo de lo que pudiera suceder. Mis manos temblaban y mi corazón latía a gran velocidad. Sin embargo seguí su orden y comencé a quitarme la ropa rápidamente, no quería que el castigo aumentase por demorarme.

Dejé la blusa y la falda en el cesto de la ropa sucia, me quité los zapatos también y los coloqué en su lugar en el armario, estaba tratando de distraerme. No sabía si también debía quitar mi ropa interior, pero decidí dejarla puesta.

De pronto la puerta se abrió y entró Ethan, se había quitado la chaqueta de su traje y había arremangado su camisa hasta sus codos. Camino hasta llegar a mí y me observó por completo.

-Debes pensar en una palabra de seguridad Alishea, necesito que la pienses y me la digas antes de que tu castigo comience, dijo seriamente

Su petición me puso más nerviosa de lo que ya estaba. Una palabra de seguridad, ¿Será que iba a necesitarla? Esperaba que no. Pero debía pensar en una, aunque con los nervios que tenía no podía pensar en nada.

-¿La tienes?, preguntó al ver que yo estaba ida en mis pensamientos.

-No, no sé qué palabra podría usar y no olvidarla, dije con temor a enfadarlo más

-Puede ser cualquier palabra Alishea, menos "alto", "para", "detente", o "por favor" porque son palabras que seguramente puedas mencionar, dijo él y mis nervios si pudieron aumentar más. -Podría ser un objeto, un color, un número, añadió él.

Bien, intenté concentrarme y decidír la palabra que usaría.

-Negro, dije inconscientemente mientras observaba el color negro de su pantalón

-Bien, entonces esa será tu palabra, no la olvides Alishea, dijo seriamente. - Ahora ven conmigo, dijo dando la vuelta y dirigiéndose a la puerta. Mis piernas temblaban y esperaba no desmayarme a medio camino a causa de los nervios.

Entramos en una habitación que Ethan no me había mostrado antes. Estaba oscura, pero cuando prendió las luces supe porque antes no la había visto. Era una habitación muy amplia y muy similar a la del club "Elixir", era una "habitación de juegos", como había dicho él, al referirse a la habitación en el club que me mostró. Tenía todo cuanto había visto en la habitación del club y quizás algunas cosas más. Mi pulso se aceleró aún más con lo que estaba viendo. Ethan cerró la puerta con seguro y pasó a mi lado colocándose frente a mí.

-De rodillas, pronunció y lo miré fijamente a los ojos. - Es una orden Alishea, dijo seriamente y comprendí que debía darme prisa. Hice lo que me pidió y me coloqué de rodillas frente a él. - Bien, siéntate sobre tus talones, ordenó luego y así lo hice. - Coloca tus manos sobre tus piernas, ordenó después y rápidamente lo hice también. - Muy bien, esa es la posición de una sumisa, siempre que entres en ésta habitación deberás colocarte en esa posición, será lo primero que hagas, dijo a modo de explicación. - ¿Quedó claro?, preguntó