9. primer beso

1.2K 133 30
                                    


- buenos días, pau. ¿cómo la pasaste anoche?

- bien pa... volví con mauro porque me lo cruce de casualidad. - el nombrado estaba entrando a la cocina.

- ¿ah, sí? mira que bien, ¿cómo se portó paulo? - preguntó a su hijastro.

- bien. - respondió el morocho algo cortante y se sentó para desayunar.

- entonces pueden empezar a salir juntos más seguido, ¿no? - el silencio incómodo se hizo presente. - ya que paulo está grandecito, le podés presentar una amiga tuya. - volvió a hablar guiñandole un ojo a los chicos.

la cara de orto de mauro se hizo presente.

- NO. - intervino paulo. - no hace falta que me presente amigas.

el padre lo miraba confundido y mauro relajó un poco la cara.

- bueno, ahora que estamos todos en la mesa tengo que decirles algo. - habló sandra ganandose la mirada de todos. - su tía claudia tuvo un accidente y no tiene quién la cuide, entonces con carlos vamos a ir a cuidarla a su casa por 3 semanas al menos, mauro queda a cargo.

los tres se miraron, en especial cande y paulo, ¿estarían a cargo de mauro? nono, esto no es posible.

- mamá, no. yo no me voy a quedar a cargo de mauro. - chilló cande molesta. - yo me voy a la casa de pilar hasta que vuelvas.

- bueno si así lo querés, anda a lo de pilar, candela, pero de ahí no te moves. - esta se levantó contenta para buscar sus cosas.

paulo sentía como la desesperación crecía dentro suyo, ¿él y mauro solos?¿en la misma casa? eso iba a terminar mal o iba a terminar mal.

-¿y cuando se van? - mauro parecia tan tranquilo, como si nada le preocupara.

- en un ratito, nada de fiestas. -advirtió sandra. -

- bue mamá que ortiva sos. - se quejó mauro.

- no me importa, nada de fiestas dije. -

- como digas. - bufó y se levantó para irse a su cuarto.

paulo fue trás él para irse a su habitación también, bueno, en realidad quería pedirle disculpas a mauro.

antes de que el morocho pudiera entrar a su habitación, paulo lo tomó del brazo haciendo que el más alto lo mirara confundido.

-paulo, ¿qué querés? -respondió serio.- ¿necesitas algo?

- si, quiero hablar con vos. -susurró y entro a la habitación sin permiso.

mauro se quedo en la puerta recalculando de donde habia sacado tanto valor el rubio para entrar a su pieza sin preguntar, después de varios segundo entró trás él y cerró la puerta.

- decime. - dijo acomodando un poco sin prestarle atención

- disculpame por lo de anoche, sé que querías cuidarme y yo lo arruine... - agacho un poco la cabeza con arrepentimiento.

mauro sonrió de ternura, pero al instante de darse cuenta dejó de hacerlo.

- no hay problema, sos puberto, tenes cambios de humor y es normal. - dijo como si nada y eso frustraba paulo. ¿acaso nunca le iba a prestar atención?

- estoy harto. - soltó de la nada el rubio enojado haciendo que el morocho lo mirara confundido.

-¿perdón? -

- si, harto de que nunca notes que estoy tratando de llamar tu atención. te odio, mauro. -

el rubio se dirigió a la puerta enojado, no sabia de donde habia sacado tanto valor para confesarle tal cosa, más tarde se arrepentiría seguro.

antes de que el rubio abra la puerta el moreno lo acorralo.

- yo también te odio paulo, desde el primer momento que te ví parado esperandonos en la puerta. - le respondió el más alto mirandolo a los ojos.

- ¿ah, si? yo te odio desde que... - no pudo terminar ya que unos labios lo callaron con mucha rudeza, mauro lo estaba besando con desesperación, como si nunca más podría volver a besarlo, como si la culpa le diese placer. se estaba volviendo loco.

puso una mano en la cintura de paulo pegandolo a él y la otra en su cuello, apretando no tan fuerte.

paulo se sentía en el mismo paraíso, nunca nadie lo habia besado ni tocado así, mauro era el mismísimo dios besando.

el rubio pasó sus manos por el cuello del más alto comenzando a jugar con su cabello, pero de un momento a otro mauro se separó bruscamente.

- perdón. - fue lo único que dijo antes de salir pegando un portazo, dejando a paulo completamente confundido y con miles de sentimientos.

[✨✨✨]

hasta q actualicé jajsja perdón ando sin imaginación

adán y eva ; paukiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora