Birthday

Day twenty

MORE AND MORE

—Me gustas mucho—el taegi se queda frío, se miran para luego mirar al moreno que se ve decidido al hablar—. No pasa ni un día que no piense en ti, no pasa ni un día en que no me arrepiente en no haberte dicho antes que te amaba, no pasa ni un día que no estés en mis sueños—traga saliva, notando las pequeñas lágrimas que se forman en sus ojos. No se siente capaz de robarle el novio a su mejor amigo, sin embargo, el sentimiento de estar sufriendo no lo abandona, no quiere sentirse así, tan arrepentido de no haber dicho antes que lo ama, que lo sigue amando y nunca cree poder ser capaz de superarlo, porque además de ser su primer amor, es la persona que siempre ha estado con él—. Perdóname, Taetae, por decir esto al frente tuyo... solo quería decirlo...

—Seamos un trío—los otros se quedan en blanco—. No veo nada malo que seamos un trío, hay muchas personas que lo hacen hoy en día.

Las palabras de Yoongi son como un calmante para Jungkook, pero para Tae, son un golpe directo a su corazón. Entiende que haya casos de relaciones de tres, no obstante, él no se ve capaz de compartir el amor que siente al ver a su gatito favorito con el de ojos de ciervo, aunque sea su bro, su mejor amigo, se niega a esa loca idea.

—Yoongi—dice con voz seria—¿Por qué haces esto? No lo ilusiones.

—No lo estoy ilusionando, Kim—responde—. No quiero que sufra por mí...—se lo piensa un rato— y si esta es la manera de hacerlo, lo haré.

El moreno ve como su mejor amigo sale corriendo con las lágrimas hacia la rueda de la fortuna. Min no se mueve ni un centímetro para ir a verlo, su mirada lastimada sube a la de Jungkook que hace un amago de sonrisa, que más bien, parece una mueca.

—El amor no tiene que ser egoísta. El amor debe poder ser entregado a todos—su voz se quiebra—¿Por qué?—se echa a llorar desconsoladamente, sentándose en el suelo, Jeon lo abraza conmovido, entendiendo el gran dolor que le provoca que Kim le haya dicho que no a su idea, pero también entiende a su mejor amigo, no le ha gustado compartir desde pequeño, todo lo que ha sido de él, nunca lo ha querido prestar, su corazón le dice que ha sido un maldito egoísta, queriendo tener él también amor por su parte, sin ver el sufrimiento que ha causado.

—Yoongi no puedes obligarlo a ver el amor a tu manera.

—Lo sé—murmura aferrándose al otro—Lo sé—repite—. No quiero dejarlo, sin embargo, tampoco quiero que sufras tú, Kookie—dice acariciándole la mejilla, con mucho miedo y cautela, el más grande une sus labios con los delgados del pálido que gime al sentir el contacto, el beso que comparten es el más dulce y sincero que alguno de los dos han podido dar, sin segundas intenciones, compartiendo saliva al mismo tiempo que se aferran uno al otro, porque saben que el amor que se tienen es tan hermoso, es tan frágil, tan dulce, que no puede existir más.

Min sube las manos al cuello ajeno, Jeon pone sus manos en la cintura ajena, los dos se aprietan y explotan juntos. Cuando se separan, sin aliento y sonrojados, están decididos, se han transmitido todos sus sentimientos y pensamientos.

—Kookie—Yoongi susurra con sus ojos navegando la multitud de personas.

—Yoonie—le responde de la misma manera sin dejar de verlo con ternura.

—Si alguna vez peleó con Taetae o nos separamos ¿estarás ahí con los pañuelos?

El mencionado se lo piensa, ladeando la cabeza, imaginándose un mundo oscuro y gris donde el amor de su vida bese de la misma manera que le besó a él, pero a otra persona.

—Claro—asiente con la cabeza—Pero...—un silencio les inunda, intercambian miradas, se sonríen cómplices—solo si cuando yo rompa con mi pareja o este me ponga los cachos, tenemos el delicioso.