Jennie y yo decidimos ver la película que había traído y, mientras disfrutábamos de la comedia, me acordé de algo.
―Hey, te dije acerca de mí pero no me dijiste sobre ti.
―Está bien... Soy Jennie Kim, tengo 25 años, nací el 16 de enero, tengo dos hermanos, mis padres son dueños de una óptica, mi color favorito es el negro y amo la música.
―Muy bien, todo en la memoria.
Sonreí y luego di un vistazo a los paquetes de comida vacíos en mi cama.
―Dios Jen, estamos tan gordas― me quejé, acariciando mi abdomen hinchado.
―Tú te comiste la mayoría― se rió y me subió la camiseta hasta el inicio de mis pechos para empezar a salpicarme de besos por todo mi abdomen, se detuvo para mirarme y pude ver la pasión que ardía en sus ojos, y también me di cuenta de que estábamos en mi maldita cama.
―Jen...
―Shh― sonrió y se dirigió a mis labios. Deslizó su nariz por la mía y sentí su respiración contra mi piel. Abrí la boca ligeramente y lentamente apretó sus labios con los míos, pero se alejó de inmediato haciéndome gemir de frustración.
―Detente― murmuré.
―¿Detener qué cosa?― me dijo con una expresión divertida.
―Deja de burlarte de mía― murmuré antes de tirar de ella para otro beso.
Gentilmente moví mis labios contra los suyos y ella abrió la boca para que yo deslizara mi lengua, masajeé cada parte de su boca y, en este momento, mis labios eran prácticamente insensibles de la electricidad.
Sonreí a través del beso cuando sentí que Jennie estaba respirando con dificultad, pero su lengua respondía con entusiasmo a la mía y estaba segura de que ella sentía las mismas cosas que yo. De repente se detuvo y se levantó para ponerse a horcajadas sobre mi, aparentemente queriendo tomar el control. Mi respiración era entrecortada mientras sus muslos se apretaron alrededor de mis caderas, la sensación eléctrica que sentía en todo mi cuerpo era indescriptible y toda la excitación fue a parar a mi centro. La miré, tenía la mirada tan oscura que incitaba a que hicieramos de todo, de inmediato me incliné para besarla pero ella me empujó contra la cama de nuevo.
Abrí los ojos y la vi mirando a mi collar. Sonrió y se inclinó para agarrar el collar entre sus dientes. Casi muero en este preciso instante.
―Eres mía― susurró lamiendose los labios sensualmente y yo... Dios no podía aguantar más, la necesitaba en ese instante.
Ví como se burló de mí y de inmediato bajó para besarme de nuevo. Mis ojos se cerraron y oía como Jennie gruñia en mi boca, tomó mi lengua entre sus labios y ligeramente la saboreaba. Mis hormonas estaban zumbando por todas partes, la fuerte excitación que se había hecho en la habitación ya me tenían al borde la perdición.
Jennie llevó una de sus manos hacía mi abdomen y empezó a acariciarme. El inesperado contacto me hizo dar un salto y empecé a moverme intencionalmente.
―¿Estás bien?― preguntó sobre mis labios. Por Dios esta mujer era increíble, todavía tenía el respeto de preguntar si estaba bien. Jungkook nunca lo hizo.
Sonreí sensualmente y besé la comisura de sus labios, deslizándome hasta su mandíbula y cuello. Giró un poco la cabeza para que yo pudiera tener mejor acceso a su increíble garganta, le di unos pequeños mordiscos y con la lengua chupaba cada parte.
Gimió, y me congele por un segundo. Yo estaba tan mojada y ese gemido hizo que mis impulsos fueran mucho más fuertes.
―Bebé, eres tan hermosa― me dijo en el oído y tomó el lóbulo con su boca. Si seguía haciendo esto mi ropa iba a parar al suelo en unos segundos.
ESTÁS LEYENDO
Lujuria Oculta [Jenlisa; adaptación]
FanfictionSi al entrar al salón de clases me hubieran dicho que mi vida cambiaría para siempre, no lo hubiera creído. Esta historia no me pertenece, es solo una adaptación. Todos los derechos a su autor original. Espero que les guste.