-Black Cat- Jimsu

Fortin

La pareja se encontraba cómodamente acostada en el sillón, o más bien Jimin acostado en el sillón y Yoongi sobre él. No veían una película, no hablaban, no comían, no dormían, solo mantenían su mente en calma disfrutando de la compañía del otro dejándose suaves besos cada cierto tiempo. Bueno, lo de la mente en calma no era tan cierto, ya que a un pequeño híbrido las dudas lo carcomían por dentro. Sonará una estupidez, pero desde que empezaron a surgir sintió la necesidad de hablarlo con el pelinaranja, pero no sabía cómo. Literalmente llevaba diez minutos pensando en como preguntar, pero temía la respuesta. Suspiró. Solo debía preguntar y ya.

"Ahora o nunca"

─ Jimin... ¿te gusto?

─ ¿Que?

─ Que si yo te gusto. Osea si estas e- enamorado de mí.

"¿Encerio estás tartamudeando? Quien lo diría, Min Yoongi"

La pregunta descolocó un poco a Jimin. Realmente ni el mismo lo sabía con certeza, así que no podría responder. Le provocaba nervios cuando estaba a su lado, sí. Pensaba en él todos los días, si, vivían juntos así que... ¿Se preocupaba por él? Obvio que sí. Pero, ¿Le gustaba Yoongi? Claro que sí. ¿Estaba enamorado de Yoongi? En realidad, una gran parte de él decía que sí. Pero siempre estaba esa pequeña parte insegura de uno mismo, que lamentablemente era suficiente para provocar dudas en Jimin. Enamorado era una palabra un poco grande para el pelinaranja.

Cuando vio los ojos del chico frente suyo decaer al no tener respuesta, se sintió culpable. De hecho... sí, estaba enamorado de Yoongi, ¿Por qué no lo admitía? Jimin soltó un suspiró y con la yema de los dedos hizo que el mayor levantara su vista que antes se mantenía fija en sus manos escondidas entre sus piernas.

─ Si me gustas Yoongi, ¿por qué no lo creerías? Es más, estoy seguro de que estoy enamorado de ti. No me dejaría besuquear por cualquiera tonto. ─ Y eso era cierto. Realmente Jimin podía en cualquier momento dejar en claro que no quería besos ni insinuaciones, pero no lo hacía. ¿Por qué? Porque en el fondo le gustaban todos esos detalles que el pelinegro hacía.

─ Bueno... siempre siento que me rechazas, digo... eres el primero en separarse de los besos, siempre escapas cuando quiero intentar llegar a algo más... ya sabes. ─ Claro que sabía. Había sido increíblemente difícil resistir a todo eso ─. Y no sé, tengo la sensación de que te estoy forzando y realmente no me quieres más que para un amigo. ─ El pelinegro lucía un poco acomplejado ─. ¡Y no hay nada de malo con eso!, no es obligatorio que me quieras de la misma forma en que yo-

─ No es eso Yoongi. Solo soy muy tímido y tengo algunos complejos con mi cuerpo, por eso no me atrevo a pasar a más.

"Además soy un virgen inexperto que no sabría qué hacer"

─ ¿Por qué? ¿La tienes chiquita? Jimin si eso te juro que a mí no me importa-

Las regordetas mejillas del pelinaranja se tiñeron bruscamente de rojo por la vergüenza.

─ ¿Qué? Nooo, no la tengo chiquita, solo me da vergüenza estúpido.

─ Bah, no sé qué más podría ser. Te he visto desnudo por detrás y no tienes de que avergonzarte ─ Rió.

"Además, estás buenísimo."

─ ¿Me espías cuando me cambio? ¡Maldito psicópata!

─ Tener una sigilosa forma gatuna tiene sus ventajas ─ El mayor se encogió de hombros y se sentó en las piernas de Jimin acercando sus labios a los de él.

─ No... Yoongi, aún no. ─ Dijo empujando un poco a Yoongi teniendo más que claras sus intenciones. ─ Lo siento ─ Respondió un poco afligido.