8, vamos a recordar

709 54 25
                                    

Cuando el country despertó, era tarde, pasando medio dia.

El Estadense fue el primero en despertar, con algo de esfuerzo pudo sacar a su padre de ensima suyo, se ducha y cambia de ropas.

Bajo al salón principal, todo estaba callado como las últimas semanas.

El español habia despedido a la mayoría de la servidumbre, por lo cual sólo este y el Estadense permanecian en el Palacio.

Estaba llendose hacia la cocina, no tenia hambre pero su padre tal vez si, al estar hay se quedó pensando.

Que le iba a cocinar a su padre, pensaba, desde muy temprana edad él habia aprendido a ser autosuficiente para sí mismo y sus hermanos, cocinado y manteniendo la casa, Palacio.

Camino hacia la alacena y vio varias especias, una idea se le vino a la mente, dispuesto a efectuar su plan se dirigió a la alacena del fondo, donde estaba guardada la mercaderia y utensilios como tambien las ollas o sartenes.

Cuando irgreso a tal, tan concentrado estaba que no notó una segunda presencia en esta, antes tampoco había notado la puerta semi abierta.

Ignorando esos echos se dirigió hacia el fondo del lugar donde divisa su objetivo, el arroz y las sartenes, lo esencial para poder realizar el platillo tradicional español y popular en la ex Argentina, la paella.

Apoyándose en el estante se coloca de puntas de pie, sus dedos apenas logran rozar con la bolsa de arroz por lo que intenta con la sartén, logra agarrar una punta pero se resbala y cae.

Por querer atrapar el sartén pierde el equilibrio pero no cae, alguien lo habia sujetado por la espalda y agarrado la sartén.

Suspiro aliviado pensando que su padre lo habia salvado pero al sentir la sarten caer desde una altura menos elevada, y que el agarre se reforzará sobre sí, le hizo dudar.

Quiso voltear cosa que fue impedida por la mano libre, lo tomó del mentón y cubrió su boca, sintio la respiracion ajena sobre su cuello provocando un escalofrío, la incertidumbre mezclada con miedo empezó a dominar su cuerpo.

Los temblores involuntarios se hicieron presentes, provocando una pequeña risa en el desconocido.

Intento hablar, pero era callado por la mano, por lo cual sólo movió sus labios en un intento de hablar en señas.

El desconocido sintio los labios del menor en su palma, no de manera repugnante solo como un intento de mensaje que decia.

-^ Quien eres? O que quieres?^...

Habia dicho con las señas o eso entendió el sujeto.

- Oh que lamentable que olvidaras nuestro encuentro...

Susurró, el acento le resultó conocido cosa que le causó desconcierto.

-^ Señor UK?^...

Pregunto, de alguna forma le tranquilizó saber quién era pero la interrogante era clara, que hacia hay y como entró.

- Oh de seguro te preguntas que hago aquí mi pequeño Plata...

Susurró su nombre con intenciones ocultas que no fueron captadas por la colonia.

UK destapó la boca del menor mientras lo daba vuelta sin soltarlo de la cintura.

- Oh mi Plata, no sabes cuanto espere esto...

De a poco fue cerrando la distancia entre ambos, el mayor colocó su mano libre en la nuca del menor para evitar que se aleje, pero este no forcejeo, lo supuso y sonrio a sus adentros.

Ahora tenia a la colonia a sus pies, al fin despues de tanto tiempo podia tenerlo.

De apoco profundizó el beso, sacó su mano de la nuca y la llevo a un bolsillo de su sacó, sacó una venda que de apoco utilizo para amarrar ambas manos del menor.

Plata se dio cuenta de las acciones del mayor e intento que frenará provocando que este lo acorrale contra los estante, lo amarró y todo se volvió negro.

Luego de unos meses se dio la noticia del matrimonio de Estados del Río de la Plata y Reino Unido, UK. El español sólo pudo contemplar sin hacer nada hasta que todo volvió a oscurecer y......




El español se despertó exaltado, respiraba con dificultad y sudaba, miro a su lado que se encontraba vacío, con los nervios a pique se levantó y corrió escaleras abajo.

Lo sabía, sabia que sólo fue un sueño, pero al pensar en las cercanía de esa fecha, lo aterraba.

Corrió hacia la sala y luego al comedor, nada, se fue a la cocina y nada solo una nota al lado de una tasa de café, decia..

[Padre, buenas tardes, te dejo tu cafe listo, saludos...

Estados del Río de la Plata]

Tomo la nota y la guardo, el cafe estaba frío, eso lo hizo pensar peor, y si ese era su manera de despedirse o si se fue aprovechándo que seguia en cama.

A paso rápido fue a la habitación por su celu, lo iba a llamar.

Cuando estuvo por marcar recordó, jamas le compro un nuevo celular y el viejo lo había perdido, el estrés lo carcomia por dentro, se iba a rendir pero el sonido de unas cajas moviéndose le llamo la atención.

A paso lento se hacerco a una de de las habitaciones del fondo, donde habia guardado cosas que ya no usaria o que pertenecieron a sus hijos.

La puerta estaba abierta así que ingresó y lo vio.

Plata estaba abriendo una caja que tenia su antiguo nombre de colonia, esta tenia la ropa que usaba cuando apenas había llegado a brazos del español, en ese entonces, imperial, eran unos lindos vestidos de la mejor tela y distintos colores.

Por que vestidos si es un chico, a España le gustaba como se veia vestido así además que era más tierno de ese modo, su cuerpo siempre tuvo pequeñas curvas y pelo largo por lo que lo confundían fácilmente y ahora igual, su pelo era corto pero su trabajado cuerpo habia adaptado varias curvas femeninas como sus caderas anchas y cintura marcada, piernas y muslos firmes y brazos delgados con algo de musculatura.

El español sólo lo contempló con una sonrisa y se le acerco.

- Plata...

Llamo, este le miro dejando los vestidos en la caja.

- Lo siento padre, no pude evitar...

Fue interrumpido por el abrazo de su padre, a Plata jamas le molestó ser vestido como chica por que le parecia cómodo y no le veia lo malo, solo era ropa.

- Que te parece ir de compras...

Propuso el mayor, queria despejarse del estrés que sentía y pasar tiempo con su hijo.

- Claro...

Respondió, el español contempló el contenido de las cajas y se le ocurrió algo.

El vestir como una niña a Plata era como un fetiche que tenia, y al parecer tiene, España.

Guardaron la ropa infantil y bajaron al comedor, Plata cocino paella tal y como fue en el sueño pero sin el intruso.

Lo sé, es corto y no se si ustedes quieran o no... Hacer que......
Den opinión o sino visto a Plata como mujer.
Y se habrán dado cuenta de que se acerca, verdad??
Además, lo del sueño es como un temor de España por perder a Plata.
El sueño revela barias cosas sobre Plata cuando fue Virreinato.
Y

lamentó si es algo cliché, para mi igual pero no se me ocurrió como borrarlo, así que espero y se rían.

Saludos.

Una colonia, otra vez... Donde viven las historias. Descúbrelo ahora