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Después de haber estado besando a Hoseok varias veces más, me despedí de él y pude jurar que fue una de las cosas más difíciles que tuve que hacer, pero me fui con la promesa de que nos veríamos pronto.

Esa noche, después de varios días de no tener inspiración para escribir algo decente, pude escribir todo lo que sentía. La razón de ello fue pensar en lo lindo que Hoseok se veía después de arrebatarle un beso y notar que estaba sonrojado y sus labios rojos e hinchados por lo que segundos antes había ocurrido. En ese momento no sabía lo que los labios de Hoseok causarían en mi.

****

-Muy buenos días-.Sonreí cuando entré a la cocina y vi a mis padres platicando.

-Vaya, alguien está de muy buen humor hoy- ¿Que si estaba de buen humor hoy? podría repartir flores por todo el mundo si me lo pidieran; cada que pensaba en la noche anterior mi corazón baila de felicidad. -¿Se puede saber la razón hijo?-.

-Nada, es sólo que tuve uno de los mejores sueños de mi vida- por más feliz que me pudiera sentir, sabía que no podía contárselo a mis padres, pues ellos no estarían felices por saber que tuviera a alguien como Yoongi.

Luego de haberme arreglado y despedirme de mi familia, salí de mi casa para tomar el autobús que me llevaría al Instituto. Cuando llegué lo primero que hice fue contarle todo lo que había pasado a Jimin; él era mi amigo de hace bastante tiempo y él era una de las pocas personas que sabía de mis salidas a escondidas para irme a bailar en el bar.

-¡NO JUEGUES!, ¡¿LE METISTE LA LENGUA!?- Así era Jimin, siempre llamando la atención de los demás estudiantes que estaban en el pasillo.

-¡SHH! Jimin esto nadie debe de saberlo- entramos a nuestro salón y tomé asiento en mi lugar -No aguanto las ganas de volver a verlo…-. Sabía que estaba sonriendo como un idiota por cómo Jimin se me quedó viendo.

-¿Y por qué no le llamas?, Sería genial que viniera por ti después de clases-.

-Pero, ¿Qué le diría a mis padres?- Por supuesto que quería ver a Yoongi, pero tenía miedo de que mi familia nos viera.

-De eso no te preocupes, yo me encargo. Solo dile a tus padres que irás a comer conmigo y listo. ¡Hoseok va a darle muchos besitos a Yoongi!- me sonrojé con sólo pensar en eso.

-¿Entonces debería llamarle ahora mismo?-.

-¡Si! Anda hazlo- Jimin parecía muy emocionado por la idea de hablarle a Yoongi.

Pero en ese instante fuimos interrumpidos por el maestro que iba a comenzar su clase. Así que en un susurro Jimin me dijo que lo hiciera en el receso.

Cuando sonó el timbre anunciando que era el receso Jimin ya estaba listo para que yo le llamara a Yoongi y pudiera salir con él. Con las manos temblorosas y sudando marqué su número. A los segundos de espera, contestó.

-¿Hola…?- su voz se oía ronca, como si acabara de...

-Cielos, ¿Te desperté?- oh no.

-No… yo estaba… haciendo unas cosas, pero dime ¿Qué pasa?-.

-B-Bueno, yo pensaba que si no tenías nada importante que hacer, p-podías v-venir…- aquí estaba otra vez mi nerviosismo cada que hablaba con él -A v-verme y no sé.. i-ir a algún lugar… pero claro si estás ocupado lo entenderé y-

-¿Tanto me deseas ver Hoseokie?- en la otra línea se escuchaba su risa como si le divirtiera mi forma de hablar.

-N-No, qué dices, la verda-

-¿A qué hora sales bebé?- SANTO...DIOS, ¡¿HABÍA ESCUCHADO BIEN!? ¡¿YOONGI ME HABÍA LLAMADO BEBÉ!?-.

No sabía que me había quedado paralizado hasta que Jimin tomó mi celular y le contestó.

-¡Hey! Soy Jimin, el mejor amigo de Hoseok pero tú puedes llamarme Mochi ya que ahora es tu novio y eso te hace mi amigo, sólo no lastimes sus sentimientos ¿Si?- qué estaba pensando Jimin, Yoongi no era mi novio, ¿O sí? -Él sale a las 2 de la tarde, pero puedes pasar antes por un ramo de flores, sus favoritos son los giras-

-¡Jimin dame eso ahora!- estaba peleando con Jimin para que me diera mi celular y así evitar pasar más vergüenza.

-Sí, es un hecho, hasta pronto Yoongi- Jimin había colgado la llamada y ahora no podía hacer nada para explicarle a Yoongi que no necesitaba comprarme algo.

-¿QUÉ CREES QUE HICISTE?-

-Lo que nunca te atreverías a decirle a tu novio-.

-Que no es mi novio- aunque no sonaba nada mal…

-Si claro, lo que tú digas-. Un día de estos Jimin me terminaría matando de la angustia.

****

Bien, faltaban dos minutos para que las clases terminaran y eso significaba que vería a Yoongi. La campana sonó y salí corriendo del salón hacia la puerta del edificio. Apoyado en uno de los pilares de la entrada, vi a lo lejos la silueta de Yoongi.

Mientras más me acercaba, veía que estaba sosteniendo algo en sus manos… No podía ser posible… Tenía unos girasoles como Jimin le había dicho. Cuando llegué hasta él llamé su atención para saludarlo.

-Yoongi, estás aquí- Sentía unas ganas enormes de lanzarme a sus brazos y besarlo, pero sentía que se vería muy osado de mi parte, así que me contuve.

-Te traje lo que tu amigo me dijo hace unas horas- tomé el ramo y vi lo hermosos que eran los girasoles, pero ni en mil años llegarían a ser más que la persona que tenía enfrente.

-G-Gracias… no tenías que molestarte, Jimin sólo estaba jugando-.

-¿Y bien, a dónde vamos bebé?-

-A-Ah, s-sobre eso… aún no sé bien a dónde podríamos ir- Aunque había tenido algunas salidas antes, ninguna la consideré como una cita, así que no estaba seguro de a dónde ir.

-Puedo mostrarte algo si quieres-.

-Claro-.

Caminamos por el centro de la ciudad y cuando vimos uno de los parques más cercanos, nos dirigimos hacia allá. Era un parque pequeño, que tenía una fuente en el centro de este y alrededor había algunos juegos para los niños. Nos sentamos en uno de los columpios que había y empezamos a platicar de diferentes cosas, pero mi mente no podía dejar de pensar en una sola cosa.

-Yoongi…- no estaba seguro de cómo preguntar esto.

-¿Si?- mi corazón empezó a latir cada vez más rápido.

-Hay algo que n-no he parado de pensar y es b-bueno, tú sabes…- Dios, quería que la tierra me tragara.

-No te entiendo Hoseok, ¿Qué quieres decirme?-.

-N-Nada, no es nada, olvídalo- no podía, era muy difícil para mí. Me levanté dispuesto a irme antes de arruinarlo, hasta que sentí como su mano sujetaba mi muñeca. Yoongi se levantó y se acercó a mi.

-¿Sabes lo que me encanta de ti Hoseokie?- mierda. Tragué duro intentando calmarme.

-N-No-.

-Que no sabes actuar bien cuando estoy cerca de ti, tu cuerpo reacciona ante mí,- cada vez estaba más cerca de mí -Y no es difícil de ver lo que está pasando, estás tan ido-.

-N-No sé de qué hablas-.

-Estoy hablando de lo mucho que me gustas Hoseok, y de las malditas ganas que tengo de besarte ahora mismo- y sin más me besó por segunda vez. Le correspondí porque era en lo único que podía pensar y no me di cuenta de cuánto lo necesitaba hasta que se alejó un poco de mí y me dijo -Eres un desastre cuando estás conmigo bebé-.

No supe bien de dónde tomé las fuerzas para volver a besarlo y esta vez me encargué de demostrarle todo lo que pensaba en ese beso que duró toda una eternidad para mí.

-Tú también me gustas Yoongi, me gustas demasiado-. Y fueron varias veces las que nos volvimos a besar demostrando todo lo que teníamos  que decirnos.

QUEEN OF DISASTER; yoonseokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora