Conectó el llamado, y las manos de Kaisuke temblaron en su lugar, pegando el teléfono a la oreja, y si era posible el tímpano, del susodicho.
—Mirá... —susurró, respirando cuanto pudo al final y tomando en esa inhalación partículas de seguridad—. Tenés que volver, no me importa nada. Si que Tetsuo te roba los turnos en la play, o que Kaneda te afana los cigarros, que no te guste el secundario y que el kiosko de la esquina cerró. Vos tenés que volver, y no me hagas berrinche, pendejo pelotudo. ¿¡Escuchaste!? Mañana, mañana volvés. O te rompo el orto a patadas. No me digas que no te avisé.
El pitido del contestador avisó que quedaban tres segundos antes del tiempo límite del mensaje de voz y el cuerpo de Kai se entristeció.
—¿Escuchaste, bobo? Tenés que volver a casa, pronto, que traje la maquina esa que a vos te gusta, la Gameboy. Y no sé cómo jugar... Pero me prometiste que me ibas a enseñar. Te dejo la puerta abierta, entrá cuando quieras.
El mensaje nunca iba a ser escuchado, y de eso Kai estaba seguro. Porque habían pasado los años, y era imposible que Yamagata volviera, como si los muertos pudieran salir del infierno.
ESTÁS LEYENDO
Akira; oneshots.
FanfictionOneshots y drabbles de los personajes de "Akira", por lo que estos personajes pertenecen a Katsuhiro Otomo. > Sin editar, puede tener errores de tipeo.
