Corazón Frio [Sasusaku] +18 ✔

Tomé una decisión

Sasuke

Duele.

Es como si mil cuchillos penetraran tu corazón y una enorme decepción crece dentro de ti, y no por alguien. Lo peor de todo es que es de mi mismo.

Veo como ella se aleja y mi corazón duele. Naruto no dice nada, sólo está ahí. Parado sin decir nada, la fiesta vuelve a la normalidad y decido salir de ahí.

No la veo en el estacionamiento y deduzco que ya se fue. ¿como pude ser tan idiota?. Tenía la intención de decirle todo pero se salió de control.

Salí con mi auto directo a su casa, me bajé ya estando en frente toqué la puerta. Su hermano salió y me miró de arriba a abajo.

—¿Que haces aquí?. —preguntó con una ceja alzada.

—Necesito ver a Sakura. —solté.

—Ah si, no está. —dijo.

—¿No ha llegado? Pero... no está en la fiesta, salió y pensé que vendría aquí.

—¿Que le hiciste Uchiha?.

Entrecerró los ojos y salió cruzando el marco de la puerta y se cruzó de brazos.

—Sólo se que la cague en grande con ella. —confesé.

—Mira, no tengo porqué meterme en sus asuntos pero desde ya te digo. Si la dañaste te daré la paliza de tu miserable vida ¿entiendes?. —amenazó.

—Me la merezco. Y puedes comenzar, lo único que necesito es reemplazar este dolor por uno físico.

Sasori de acercó a mi y lo miré expectante a lo que iba hacer.

—No, respeto a Sakura y no me meteré en esto. —dijo encogiendose de hombros.

—Pero yo la...—Y fue rápido, me propinó un puñetazo que me hizo caer de culo, me llevé la mano a mi boca, me rompió el labio. El sabor metálico invadió mi boca.

—La cagaste si. Ahora saca tu trasero de aqui y ve como arreglas ese problema. —me señaló.

—¿Pero dijiste que la respetabas?. —reclame.

—A ella, a ti no. Ella no está aquí por alguna razón y eso se reduce a que la lastimaste así que..., actúe conforme a la ley de hermanos. —se frota la mano.

—De acuerdo. Gracias.

Me incorporé y caminé hasta el auto. Entré  y salí de la residencia.

Maneje horas buscándola, parques, playa, nada no está en ningún lugar y su celular sonaba apagado.

La busqué hasta que la maldita gasolina ya no dio para más. Llegué a casa y bajé del auto.

Entré e Itachi estaba sentado en el sofá, me vio con un enojo que ya sospechaba a que se debía.

—Te dije que no jugaras Sasuke. —dijo con una mirada sombría.

—No fue así como fueron las cosas. —caminé hacia las escaleras.

—¿Y como fueron? Le dijiste "mira Sakura jugaré contigo pero no te enamores, si". No seas pendejo Sasuke. No sabes como está ella. —dijo.

—¿Y tu si? No sabes nada, ¡nunca jugué con ella, sólo fue un error, yo en verdad la quiero!. —grité.

—¡No!, sólo piensas que si cuando no es así. ¡Si la querías lo primero que debiste hacer es decir la puta verdad!.

—Lo sé, ¿crees que no me duele? ¿crees que estoy feliz? ¡la lastime!, a la única mujer que he amado con toda mi maldita alma. Juré que no sería como su maldito ex... —me quedé callado cuando él habló.