CUARENTA Y NUEVE

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—FINAL: PRIMERA PARTE—


Lauren POV.

—Llamo al señor Alejandro Cabello al estrado— la voz de aquel hombre que lo estaba defendiendo en aquel caso, sonó en toda la sala.

El padre de Camila; vestido en un traje naranja y con esposas en la manos, se levantó sin decir nada, y en silencio pasó al lugar en donde sería interrogado.

Hoy era el día decisivo. El juicio contra Alejandro tenía que resolverse hoy al final del día, y Camila no podía estar más nerviosa. Ella temía que le negaran la custodia de Sofi, pero yo en realidad no lo dudaba ni por un instante.

—Señor Cabello...— oímos a su abogado decirle de frente— ¿jura decir la verdad, toda la verdad y nada más que la verdad?— preguntó

—Lo juro— su mirada era dura. Se estacionó en la morena a mi lado y escuché a Camila suspirar casi para si.

—Señor Alejandro, usted está siendo acusado por delitos muy fuertes...— comenzó el hombre castaño mientras caminaba de un lado a otro, concentrándose en sus palabras— violencia doméstica a sus hijas; eso en definitiva debe ser desesperante, ¿no le parece?

—Objeción, su señoría— alzó la voz Anders a nuestro lado— no es importante

—Al punto— le dijo el juez al abogado de Alejandro, en acuerdo con nuestro abogado.

—Bien— aceptó— Cabello, ante esta acusación, ¿como se declara?

—Inocente— contestó firmemente

—¿Por que?— fingió tener duda

—Porque no hice nada de eso, ¿golpear a mi hija menor?, ¡por favor!— se mofó de la idea; aunque sin querer dejó un cabo suelto que espero que Anders haya notado para cuando fuese su turno

—¿Que hay de Camila?, su hija mayor— preguntó y al instante, Camila alzó su mirada cuando escuchó su nombre

—Jamás la toqué— la respiración de Camila se alteró al escuchar aquello. Yo no entendía como ese idiota podía ser tan cínico de mentir ante la corte

—¿Y los testimonios de la Psicóloga, la señorita Hansen, y Sofía, su hija?

—Camila tiene muchas influencias ahora. Ella puede manipular a muchas personas para que digan lo que sea para hacerme ver como un monstruo— miré de nuevo a Camila y vi como sus labios se movían en silencio y un "Lo eres" salió inaudiblemente— ella y su... marioneta que tiene como pareja— que hijo de perra. Noté las manos de Camila hacerse puños en furia y frustración; aquel testimonio estaba siendo un circo entero y Alejandro era el cirquero— ellas dos sólo quieren quitarme a mi hija— noté como los ojos de aquel hombre se pusieron vidriosos y no lo podía creer, ¿lágrimas?, ¿en serio?

—Esto parece dolerle mucho— esta vez, el abogado dijo con un tono más profundo.

—Es un dolor muy grande— admitió con sentimiento. ¿Porque lloraría un mounstruo como el?— lo e perdido todo, toda mi familia se fue a la ruina y yo no fui capaz de recuperarla— bajó la mirada unos segundos— perdí a mi hija más pequeña hace dos semanas cuando Camila regresó a Miami, a ella la perdí cuando una mujer despreciable llegó a su vida y jamás la soltó— aquello iba con rencor. Me miró en ese instante y yo no pude hacer otra cosa que poner la mirada dura e imperturbable; no dejaría que me humillara de esa forma— y perdí a mi esposa por culpa de mi hija— negó amargamente— mi amada Sinuhe.

—Parece ser terrible— dijo aquel hombre con pesar— como ven, señores del jurado— se dirigió esta vez a las personas al costado— este hombre no ha cometido ningún delito— lo señalaba— el está sufriendo, amaba tanto a su familia que ahora que la ve destruirse no puede ser capaz de contenerse. Yo les pido, que piensen con calma su decisión, que lo analicen, y que se pregunten: ¿Es este hombre culpable?, ¿o es solo una víctima más de la intervención al sistema, hecho por los ricos y sus privilegios por su posición social?— esta vez nos miró a nosotras— porque en todo caso, el único delito que cometió este hombre, es hacer lo que sea por recuperar a su quebrada familia.

Encuentro No Deseado (E2) -- CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora