Eternally 🔞 [TXT]

¿Habrá luz aún para los demonios?

Soobin había tomado el volante porque Yeonjun estaba al borde de un colapso nervioso.

—Esa carretera que tomaron solo conduce a un lugar, y el retorno está a un par de kilómetros, si regresan vamos a verlos pasar.

Yeonjun asintió, sus dedos temblaban mientras intentaba abrir la app de localización e ingresar a la cuenta de su primo.

—¿Sabes su contraseña? —preguntó Soobin apretando el volante con tal fuerza que los nudillos se le pusieron blancos.

—P-probablemente usa la misma para todas sus cuentas.

En el asiento trasero, Taehyun seguía temblando por la adrenalina.

—¿C-crees que estará bien? —murmuró.

—Nadie se muere de un balazo en la pierna —dijo Beomgyu.

—Lo siento —dijo Taehyun con ojos llorosos, apenas asimilando lo que acababa de hacer.

—Se lo merecía.

De repente Taehyun comenzó a llorar y Beomgyu no supo que decir, solamente lo abrazó, todo era su culpa, él los había llevado ahí, los había arrastrado con sus problemas, solo eran un montón de niños estúpidos, nunca debió creer que podía salir de todo eso solo.

¿Por qué estaban yendo a la boca del lobo? ¿Por qué no lo abandonaron con su padre y llamaron a la policía?

Los brazos de Taehyun se aferraron a su cintura, sus puños arrugaban la tela de su sudadera color azul pastel y sus lágrimas cálidas humedecían su hombro, respirar su aroma le arrancó aquellos pensamientos. Lo abrazó con más fuerza, era lo único que podía hacer, Taehyun siempre había estado ahí para él, y no estaba seguro de merecerlo.

—¡Es por ahí! —gritó Yeonjun rompiendo su burbuja.

Taehyun se soltó del mayor limpiándose las lagrimas con el dorso de la mano y se asomó por la ventanilla del coche, más adelante al final de un camino de tierra, había una verja de madera despintada que alguien había dejado abierta, las huellas en la carretera indicaban que una auto había pasado por ahí no hace mucho.

—Esos idiotas ni siquiera pensaron en apagar el teléfono —dijo Soobin— ¿cuál es el plan?

—Creí que tú tenías uno... —respondió Yeonjun.

—¿Qué? —las manos de Soobin sudaban tanto que sentía el volante resbaloso— No, ¿por qué yo?

—¿D-deberíamos llamar a la policía ahora? —interrumpió Beomgyu.

—Acelera —dijo Taehyun al mismo tiempo.

—¡Qué!

—¡Solo acelera! —gritó el menor— ¡Si vez a alguno de ellos lo arrollas!

—¡Acabo de sacar mi licencia! —protestó Soobin— ¡No la quiero suspendida!

—¡Es mi auto, estoy de acuerdo, acelera! —dijo Yeonjun— Taehyun dame la pistola, ustedes buscan a Kai.

—¡Ni siquiera sabes qué hay del otro lado de la cerca!

—¿Tienes un plan mejor?

Un trueno rompió el cielo y un relámpago iluminó a lo lejos.

Soobin suspiró y pisó el acelerador, el motor rugió a medida que el auto ganaba velocidad y atravesó la entrada llevándose parte de la cerca.

Por un momento no pudo ver nada debido a la nube de polvo que se había levantado, se detuvo cuando vislumbró una choza de madera unos metros más adelante.