Familia

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-¡Amelie!- gritaban a lo lejos

Amelie diviso a una pequeña niña corriendo, la pequeña llevaba un hermoso vestido rosa y una coleta.

Esa pequeña llego hasta los brazos de su padre.

-Papi papi, atrape una mariposa, ¿me viste?- decía La Niña entusiasmada

-Si, ahora ve a que te bañen, estar así de sucia no es digno de una dama- dijo su padre alejándose

Amelie derramo unas cuantas lágrimas al darse cuenta de que la pequeña era ella.
Se dio vuelta y el escenario cambió completamente, estaba en una habitación blanca con muebles dorados.

-Amelie- musitó la voz de una dulce mujer

Amelie levanto su mirada y vio a una mujer vestida de blanco.

-Todo estará bien mi niña, te lo prometo- dijo la dulce mujer abrazándola

-Mamá- contestó- No me dejes sola por favor

-Nunca te he dejado sola- dijo su madre

-Mamá, mi padre está...- tartamudeo Amelie

-Lo se, pero no todo es como parecer ser mi niña- dijo su madre acariciando su rostro- el necesita tiempo, lo volverás a ver

-No entiendo-

-No necesitas hacerlo ahora-

-Déjame quedarme contigo un poco más- dijo Amelie llorando

-Enjolras es un buen chico y me agrada- dijo su madre riendo- aunque a veces puede ser un poco testarudo

Amelie soltó una carcajada y abrazo a su madre una última vez.

[...]

-Amelie, ¿me escuchas?- decía Enjolras

-Si te escucho- dijo débilmente Amelie

-Gracias a Dios- musitó- ¿cómo te sientes-

Amelie no contesto, y le dio un abrazo a Enjolras, no quería soltarlo.

-Vaya, que cariñosa- dijo riendo

-No puedo creer que mi padre...-

-Entiendo, no tenemos que hablar de eso si no quieres-

-Es que no puedo creer que se- hizo una pausa- se suicidara, no creo que lo haya hecho

-Pero el oficial te dijo que-

-Si lo sé, si lo escuche Enjolras, pero no lo creo, ademas no vi su cuerpo, solo su gorro-

-No lo se Amelie- decía Enjolras algo preocupado

-Esta vivo, yo lo sé- dijo Amelie

-Deberías descansar- dijo Enjolras levantándose

-¡Ya se que no me crees! Pero no tienes que tratarme como si estuviera loca-

-Amelie, solo estoy preocupado, no te estoy tratando como una loca, lo juro-

-Lo siento es solo que...no puedo-

-Tranquila, ahora seremos una familia- dijo Enjolras tomando la mano de su amada- algún día tendremos muchos pequeños Enjolras corriendo por una hermosa sala y ellos planearán la siguiente revolución- dijo riendo

-Si...prefiero que no lo hagan- dijo Amelie riendo mientras se recargaba en el hombro del líder

-¿Lo del correr en la sala o lo de planear la siguiente revolución?-

-Ambas, pero me preocupa más la parte de la revolución- dijo riendo

Tal vez por fin podría tener una familia, amor, todo lo que le hizo falta, al fin estaba al alcance de sus manos.

[...]
Marius y Cosette celebraron su boda casi 2 semanas después, ya que no podían esperar más.
1 mes después Enjolras y Amelie hicieron lo mismo, se casaron y al cabo de unos años formaron una familia.
Jean y Courf decidieron explorar el mundo y jamás regresaron a Francia, tratando de olvidar su pasado.

Amelie trataba de arreglar a sus pequeños hijos para llegar a tiempo a casa de sus viejos amigos Marius y Cosette.
El matrimonio con el líder había dado el resultado de tres pequeños niños, Gavroche (9 años), Rosie (8 años) y Grant (6 años).

-Hijo por favor, necesito que dejes de correr para poder cambiarte la ropa- decía Amelie al más pequeño de sus hijos Grantaire

-¡Mamá! Ya te dije que no quiero ir a la casa del tío Marius y de la tía Cosette- decía el pequeño frunciendo el ceño- Eponine se la pasa molestándome- decía refiriéndose a una de las hijas de Marius y Cosette

-Eponine sólo quiere jugar contigo amor- decía riendo Amelie

-¿Ya están listos mis pequeños?- preguntó Enjolras asomando la cabeza por la puerta

-Solo falta Grantaire-

-Mamá ya vámonos, quiero enseñarle a Jean los movimientos que mi papá me enseñó con la espada- gritó Rosie la segunda hija del matrimonio mientras agitaba una espada de juguete, ansiosa por mostrarle a Jean el hijo mayor de Marius y Cosette sus nuevos trucos

-Yo ya estoy listo papá- dijo orgulloso Gavroche el hijo mayor, el cual se caracterizaba por ser responsable

-Listo- dijo Amelie sonriendo al ver a sus 3 pequeños

-¿Lista?- preguntó Enjolras

-Lista- contestó Amelie

Subieron al carruaje y se dirigieron a casa de Marius y Cosette. Este matrimonio dio 2 pequeños frutos Jean (8 años) y Eponine (5 años).

Llegaron y se recibieron con un cálido abrazo. Los pequeños corrieron al jardín a jugar.

-Me alegro de que llegaran- dijo Cosette guiando a sus invitados a la sala de estar

-Gracias por invitarnos, amamos venir a verlos- dijo Amelie

-Quisimos invitarlos para hablar sobre un proyecto que tenemos en mente- dijo Marius

-¿un proyecto? No hablaras de otra revolución ¿o si?- dijo Enjolras riendo

-No no- contestó Marius riendo también- Es un proyecto más calmado, no al estilo Enjolras

-Sabemos desde hace años, qué hay demasiados niños en la calle, muriendo de hambre y la verdad a las personas del gobierno no les importa- dijo Cosette desconcertada

-Entiendo-

-Queremos crear de nuestros fondos un orfanato, el cual le brindará a los niños educación, alimento y amor- dijo Marius sonriendo- queremos nombrarle "Maison de Gavroche" lo que significa la casa de Gavroche

-Es una idea maravillosa, ¿qué necesitan de nosotros?- preguntó Amelie

-Apoyo económico y sobre todo el apoyo de nuestros buenos amigos en este proyecto- dijo Marius

-Estamos dentro- contestó Enjolras sonriendo

Amelie observo de reojo como en el jardín los pequeños jugaban, riendo, gritando y siendo felices.
Después observó a Enjolras, un hombre cariñoso, terco y sobretodo el amor de su vida.
Finalmente observó a Marius y a Cosette, sus compañeros incondicionales.
No tuvo una familia tradicional, sin embargo la familia que ahora tenía era mucho más valiosa.

Poco sabía que su historia aún no llegaba al final, pues quedaban algunos secretos que descubrir y unos cabos sueltos por atar.

La Hija De Javert Donde viven las historias. Descúbrelo ahora