Sugar On Top - KookTae

Capítulo 13: Pecan Pie

Capítulo 13: Pecan Pie

El Día de Acción de Gracias llegó más rápido de lo esperado y, entre proyectos finales y el estudio, planes fueron hechos libremente. Taehyung sabía que tendría que ir a casa en algún momento, porque perderse la comida de su madre estaba completamente fuera de discusión, pero ir a casa significaba enfrentarse a su padre.

Y enfrentar a su padre significaba el que le recordaran a diario que no era el hijo ideal.

Quería escaparse donde Jungkook por las fiestas, para evitar a su padre. Pero antes de que siquiera pudiera pensarlo-

—¿Oh, fotografía?

Había vuelto a casa por el largo fin de semana.

Taehyung levantó la vista de su pila de ropa sucia y asintió. Estaba sentado en su antigua habitación, rebuscando entre su bolsa de ropa, mientras su madre le echaba un vistazo a su horario para el nuevo semestre.

—Sí, pensé que debía darle una oportunidad. El profesor Choi me la sugirió —dijo Taehyung, tirando una camiseta por la habitación—. Si eso está bien.

—Todo depende ti. Lo que quieras hacer —respondió Hye—. Y estás tomando un curso de arte digital. ¿Otro curso de dibujo?

—Sí, es un curso de dibujo superior —dijo Taehyung—. Tienes que tener muy buenas calificaciones y recomendaciones para ello. Y desde esa muestra de arte, bueno…

—¿Bueno?

—Bueno —continuó Taehyung—, otros maestros en el departamento de arte me preguntaron sobre mis pinturas. E incluso me ofrecieron un lugar destacado en una de las exhibiciones de la universidad. Digo, es solo un escaparate, pero está en medio de una zona del edificio de arte muy concurrida y-

—¡Taehyung! ¡Eso es increíble! —exclamó Hye, llevándose las manos a la cara—. ¡Estoy tan orgullosa de ti! ¿Por qué no me lo dijiste antes?

—¡Porque me acabo de enterar! —exclamó Taehyung de vuelta, riéndose un poco—. Quería decírtelo en persona.

—Eso es espectacular —dijo Hye—. ¿Ya sabes cuáles pinturas van a utilizar? ¿O vas a pintar más?

—Umm… Estoy usando la de las flores —dijo Taehyung distraídamente, sentándose en un montón de jeans—. Y acabo de terminar un retrato de Jisoo y Rose. Quedó muy bonito y me hubiera gustado traerlo aquí, pero aún está secando. Te enviaré una foto de él cuando regrese al departamento.

—Me encantaría verlo, definitivamente —dijo Hye—. ¿Y estás tomando otro semestre de francés? Pensé que odiabas el francés.

—Lo hago, pero tengo que tener un crédito de un tonto idioma extranjero —respondió Taehyung, rodando los ojos, exasperado por su propia elección de curso—. Era francés, español, italiano o japonés. Y como ya tomé la primera parte de francés, Choi sugirió que siguiera y lo terminara en vez de empezar otro idioma desde el principio.

—Eso tiene sentido.

—Ajá, pero debería haber escogido español en vez de dejar que Hoseok me arrastrara hacia la clase francés. Pendejo.

—Pero al menos lo tienes a él para que te ayude.

—Supongo. Aunque sigue siendo un idiota.

—¿Cómo está Hoseok, por cierto? Espero que le esté yendo bien.

—Él… —la voz de Taehyung se puso más aguda antes de que pudiera ser capaz de continuar. Su pecho se sentía apretado mientras recordaba todo lo bueno. Todo lo feliz. Todo lo estúpido. Cada emoción que tenía por Hoseok volvía corriendo hacia él al mismo tiempo.