-Por que no pasa Himuro-san, le explicaremos todo adentro- Dijo el capitán de Rakuzan
- Vaya, ahora invitan a pasar a mas personas a un departamento que no es suyo, esto va mejor y mejor- Dijo Takao mientras ingresaba al hogar, no sin antes tomar del brazo a la pequeña sombra, quien estaba por escabullirse a ir a buscar a su tigre.
- Bien, adelante, yo cerraré la puerta- Dijo Himuro con una sonrisa al ver la cara de los de la Generación, a excepción de Akashi, Kuroko, y Midorima,quien sólo atinó a acomodarse los lentes,y a fruncir el ceño ante sus palabras.
-Esta bien, vamos chicos- Respondió Akashi siendo seguido por el resto de los milagros.
Al ver que todos se alejaron de la puerta este le dijo a Takao que se quedara junto a ella por si Kuroko se escabullía e intentaba salir, a pesar de que el también quería algunas explicaciones aceptó ya que sabía que si dejaba salir a alguno de ellos seguramente buscaria al tigre y este como lo había demostrado al huír anteriormente todavía no estaba listo para algún tipo de confrontación.
Dejando a Takao en la puerta Himuro se dirigió a la sala del departamento esprando que todos tomaran asiento y manteniendo un ojo vijilante en Kuroko tomó asiento en una de las sillas individuales cercanas a la puerta, ya teniendo en frente a toda la Generación , puso los codos sobre las rodillas y con la mirada fija en el pelirojo preguntó.
- Y bien ¿Cual es su explicación ?, por que para que valga la pena hacer llorar a mi hermano ha tal punto de quedarse dormido del agotamiento debe ser una realmente buena.
Al escuchar esto se pusieron visiblemente tensos, y es que el solo pensar en el dolor que le causaron a su ser amado los hacia querer artodillarse y rogar perdón.
- ¿Taiga pasó la noche en tu casa?
-¿Pasó frío?
-¿ Tomo un baño?
-¿Que ropa usó?
- ¿Viste si comió algo?
-¿Viste si tomó algo?Sinceramente se sintió sorprendido al verse atacado por las preocupaciones de aquellas personas que en un principio habian causado tanto daño, sin embargo, al ver el dolor y la ansiedad en sus expresiones pensó que por lo menos podía contestar aquellas preguntas.
-Si, pasó la noche en mi casa, estaba helado cuando entro pero no tomó un baño ya que se quedo dormido, comió y tomo algo en cuanto se despertó.
Suspiraron de alivio al ver que por lo menos estaba bien cuidado desde la ultima vez que lo vieron.
- Ahora que tienen sus respuestas a mi también me gustarian algunas.
Asintiendo ante la expresión seria del pelinegro Akashi pensó que lo mejor seria empezar desde el principio sin omitir ningún detalle, al fin y al cabo el era escensial para optener el perdón de su tigre.
- Al principio fue idea de mi padre, asistió al último partido en el que Seirin nos venció en la Winter cup, los Akashi nunca habiamos perdido en nada y eso de cierta manera hirió su orgullo, se dispuso a destruirlo de cualquier manera disponible, el notó que tenía cierto interés en Taiga y me pidió que lo hiciera dependiente de mi, de mi cariño, hasta el punto de que al dejarlo el dolor fuera tal que lo hiciera abandonar el basket y si podía también el país.
Apretando los puños Himuro tomó aire y se dispuso a seguir con la comversación antes de matarlos a todos de una vez por todas.
- Eso eres tu, pero, ¿y ustedes?, ¿Que hacian ustedes con Taiga?- Preguntó echandoles una mirada a acada uno de ellos.
-Todos teniamos un nivel de interés en Taiga-kun, el padre de Akashi-kun sólo nos alentó a hacer algo al respecto, si bien no fue por las razones correctas no creíamos que fuese a terminar de esta manera, sabíamos que el iba a terminar herido pero no esperábamos que terminara así de mal, creímos que si nos tomaba el suficiente cariño se distraería y dejaria el basket, y tal vez cuando lo dejáramos estaria lo suficientemente avergonzado para irse.