Más Que Amigos [IronStrange]

IV

Tony dió un largo bostezo una vez se acabó de despertar, estiró los brazos aún somnoliento y abrió los ojos, por unos segundos se asustó al caer en cuenta de que esa no era su habitación. Las paredes y los muebles eran de madera algo desgastada, todo parecía estar en orden a excepción de un montón de libros que descansaban desordenados sobre un escritorio, fue allí cuando cayó en cuenta de que estaba en la habitación de Stephen, y un dolor que fue desde su trasero hasta su espalda baja se lo recordó.

Stark se recostó unos minutos más en la suave cama, se cubrió con la sábana y se vió tentado a dormir un rato más, pero sabía — no con total certeza — que tenía una agenda apretada para ese día. Estaba sólo en la habitación, así que, resignado y sin dar mayor importancia decidió meterse a bañar, paseándose con total confianza en la habitación del hechicero, del cuál, cabe resaltar, no hay rastro alguno.
Se colocó bajo la lluvia artificial con la esperanza de que una ducha caliente le ayudaría a despertarse y con algo de suerte, también aliviaría las horribles agujetas que tenía. Mientras el agua le recorría la piel pudo revivir en su cabeza la noche anterior, lo que provocó en él una nueva erección, maldijo por lo bajo, no tenía tiempo de hacerse cargo de eso ahora, así que cerró los ojos y armándose de valor abrió con totalidad la llave del agua helada, pero, desgraciadamente  no tuvo demasiado éxito en librarse de sus pensamientos

Luego de la intromisión por parte de Levi no habían tenido que decir nada más, lo habían visto en los ojos del otro, querían seguir con lo que estaba pasando, aún con la incertidumbre de su inexistente experiencia. Habían ido hasta la habitación de Stephen donde comenzaron a besarse sin prisa, incluso de manera torpe tomándose su tiempo, quitaron los cojines y la cobija de la cama, se quitaron el calzado, y luego se quedaron mirando unos segundos, inseguros de seguir con lo demás.

El hechicero se encontraba nervioso de tener que sacarse los guantes y mostrar sus cicatrizadas manos; y por otro lado, el multimillonario se sentía aterrado de dejar que el hechicero — y cualquiera en general — tocara su pecho; más en específico, su reactor Arc, el cual había quedado gravemente lastimado durante su lucha con los súpersoldados.
Tras unos segundos en silencio, el hechicero fue el primero; se sacó los guantes con delicadeza, giró la vista a otro lado, evitando mirar sus propias manos temblorosas. Pasaron unos segundos antes de que el ojiazúl pudiera sentir las manos del menor rodear las suyas, se atrevió a mirar sus ojos cafés, perdiéndose en ellos, sintiendo como el castaño acariciaba su manos con sus dedos pulgares.

De manera insegura, Tony se sacó la playera de su pijama — que vergonzosamente había olvidado que tenía puesta —, y por primera vez, el hechicero pudo ver aquél reactor sin una tela de por medio, Tony lo miró a los ojos, llevando la mano del neurocirujano a su pecho, sintiendo la circunferencia en aquel aparato que de cierta forma lo mantenía con vida.
Aquel acercamiento fue suficiente para armarles de valor y seguir con lo que inicialmente estaban haciendo, una vez terminaron de desvestirse se quedaron quietos, no tenían idea de que hacer luego, ambos habían tenido sexo, pero nunca con un hombre. Y es que técnicamente sabían lo que tenía que pasar, uno de ellos debía ser el de "abajo", pero, ¿Quién?
El primer pensamiento de Strange fue que probablemente sería él, incluso se preparó mentalmente y es que, le parecía absurda la idea de que Antony Stark, el multimillonario, Playboy, filántropo y hombre de hierro fuera a ser el "pasivo" y vaya sorpresa se llevó cuando éste se ofreció voluntariamente. Después de eso, técnicamente lo demás era lo fácil, "técnicamente"

El primer intento había sido un fracaso total, Stephen no había sido lo suficientemente cuidadoso y eso le costó a Tony un par de lágrimas, el hechicero se disculpó mil veces por ello, pero aún así decidieron intentarlo una vez más. Stark pidió a Viernes, su inteligencia artificial, que le diera información relevante al respecto, y oh mierda, fueron bombardeados por imágenes explícitas y mucha información. Tardaron quizás una media hora en estar informados al menos en lo básico, y esos treinta minutos fueron definitivamente una gran inversión, porque el segundo intento fue todo un éxito