Alina.
—deberías haber ido a España en lugar de estar stalkeando a todos desde tu laptop.
—¡Dije que no estoy revisando sus perfiles tío!. —bufe cerrando mi laptop en dónde estaba mirando el perfil de Payton esperando que subiese una historia o algo que me dijese que sí había asistido al viaje. Y por lo menos tener una razón por la cuál decir menos mal no fuí.
—Claro que lo estás haciendo. —David pasó a mi lado dirigiéndose a la cocina, rodé mis ojos hundiéndome en el sofá mirando a el cachorro sugar morder uno de sus juguetes para perro. — En istagra se preguntan por qué no asististe.
—Instagram. —corregí soltando una risa ante su palabra tan mal pronunciada. Aproveche que estaba ya en la cocina y volví a abrir mi laptop refrescando la página bufando, nada de estados.
—Está niña no fue. —habló fuerte, provocó que mis ojos se abrieran más de la cuenta y girara a verlo. Estaba de espaldas preparando el almuerzo. La casa era de concepto abierto por lo que no había paredes que ocultarán nada. — vi a su padre en el Super mercado y adivina quién estaba con él. Es extraño esa gente ni siquiera se preocupan por lavarse sus propios dientes, estudie con el en la secundaria y siempre ha sido un presumido.
El tío David se giro sobre sus talones levantando ligeramente el cuchillo que sostenía con el cual estaba cortando vegetales. A veces hasta yo me sorprendía de los gestos de él, sus dotes de vieja chismosa eran muy desarrollados.
—¿Quién?.
—¡Payton niña!.
Maldije bajito y volteé a ver la pantalla de la laptop, busqué el perfil de Elizabeth. Ya lo había revisado antes, ella suele subir pequeños fragmentos de sus actividades diarias cuidando mucho la información que daba. Una vez sin querer subió un estado en donde salía el restaurante en el que cenariamos y diez minutos después habían más de veinte personas afuera. Es algo que puede ser sumamente peligroso, por lo que subía ahora boomerangs o sí subía una historia más larga las descargaba y luego la subía después de irse de dicho lugar para prevenir.
—Elizabeth te lo dijo.
—yo sé.
Sonreí al ver en sus historias varias fotos en una piscina con los chicos, Grant su novia, Joey con otra chica.
—idiota.
Lauren, Dixie, Griffin, los Rowland. Loren y claro Sophia.
—¡Agh!. —cierro de golpe la pantalla, genial. Había formado un berrinche y todo para nada, porque resultó que Johnny dijo que ella iría y al final no fue.
Quedé como una tonta celosa.
—sí. Quedaste como una. —mi tío David aparece frente a mí con una bandeja de brownies. Hasta lleva un delantal rosa de flores, río ante eso y él señala mi celular que esta encima de la mesita. — llama a Elizabeth.
—¿Para qué?.
—para tu entrada triunfal. —se va y veo mi celular tomándolo rápidamente para subir casi corriendo las escaleras hasta la habitación que comparto con mi prima. Le llamo por facetime. Varios tonos suenan y luego puedo ver el rostro de mi prima con una sonrisa.
—¡Hola ally!. —dice y mira al frente, apesar de llevar lentes puedo deducirlo por como mueve su cabeza, escucho varias risas y si mi instinto no falla Johnny está frente a ella. — ¿Todo bien?.
—bueno, necesito hablar contigo de algo...—digo mirando a Grant que recostó su cabeza del hombro de su hermana. Lili frunció su ceño y notando mi tono de voz de sal de ahí porque es serio. — Lili.
—e-eh. —mira al frente y luego a sus lados, sigo escuchando voces pero ella se levanta dejando su celular unos segundos enfocando su cuello.— vuelvo en un rato chicos.
No tardes Lili.
Frotó un poco mi cara al escuchar su voz, me siento como cuando la primera vez que lo ví. Elizabeth se aleja de todos, aún sigue en la zona de la piscina pero un poco más lejos. Se sienta en una de las sillas de sol y sube sus gafas a su cabeza achinando un poco sus ojos por el reflejo del sol. Puedo notar sus mejillas rojas y un poco de bolsas bajos sus ojos.
—¿Qué pasó?.
—¿Sabías que Payton no iba?. —pregunto y ella forma una sonrisa en sus labios mirando detrás de su espalda seguro asegurándose de que no estaba alguien.— Lili.
—¡Te dije que tenías que venir!.
—SHHHH. —grito sabiendo que ella iba a llamar la atención de todos. Elizabeth abre sus ojos más de la cuenta y tapa su boca conteniendo la risa.— necesito ayuda.
—¿Ayuda para?.
—Lili, no me hagas decirlo.
—no, no. Quiero oírlo. —subió una de sus manos posicionándola detrás de su oído. Achinando un poco sus ojos, bufé pataleando un poco reincorporándome en la cama.— te escucho.
—Lili, quiero ayuda para ir a España.
—ajá, ¿Y qué más?.
Muerdo mi labio pensando un poco, ladeó mi cabeza pensando y revivo en mi mente todos los momentos que viví con Johnny, recordé el día del prom donde me dijo que era una joya. El día que hablamos y le conté acerca de mi vida. Cuando lloré en el hospital y él me dijo que todo estaría bien. Cuando nos besamos, cuando nos casamos falsamente en Canadá. Todas esas veces que reíamos juntos, cuando me cantaba a veces pequeños versos de sus canciones.
Yo no lo había superado y jamás lo haría.
—quiero tú ayuda porque...Bueno, quiero volver con Johnny Lili.
