Capítulo 30: Esta es mi familia

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Annie.

Ross me beso.

Ross. Me. Beso.

¡Ross me beso!

¡Mierda! Ross me beso.

No entiendo porque lo hizo, él me dejo claro que no me quiere y ahora viene me besa como si nada, no lo entiendo y no sé si algún día podré entenderlo, él es muy impredecible y eso me marea más que este embarazo, el cual decidí seguir adelante. Esta mañana fui al hospital a ver a la Dra. Hernández para comenzar con mi tratamiento, así que desde hoy comencé con las inyecciones y no son nada lindas, pensar que me tengo que inyectar en el vientre a diario no es lindo, todo sea por la salud de mi bebé.

Cuando salí de consulta me encontré con Theo y el Dr. Hernández, el pequeño se abalanzo sobre mí y su abuelo lo reprendió por ello, ese niño es impulsivo y al parecer no tiene filtros al momento de hablar, eso me agrada de él. Hable algunos minutos con ambos y Theo me dijo que estaba bastante entusiasmo por venir el fin de semana a casa de mis padres y que esperaba que le dé un recorrido por ella, sobre todo en mi habitación; al parecer tiene una gran curiosidad por esa parte de la casa y no entiendo por qué.

Los doctores Hernández se alegraron de mi decisión y ambos organizaron un gran cronograma de consultas, las cuales consisten en ecografías semanales, consultas también semanales e inyecciones diarias, estas última por lo menos me las puedo dar yo sola. Las inyecciones son algo costados y tengo suerte de tener dinero, pero desde que salí del hospital no he dejado de pensar en todas las mujeres que no pueden acceder a las inyecciones y sus vidas, junto con sus embarazos, corren riesgo y no es justo que eso pase.

Tengo una idea para poder solucionar eso, pero antes debo hablar con Ethan y es que tengo una idea para la fundación que creo la abuela Raquel y que ahora maneja el idiota de mi hermano, espero que me apoye en la idea o de lo contrario abriré mi propia fundación, aunque no sabría cómo manejarla. Esta idea no dejo mi cabeza en todo el día, hasta que Ross me envió ese mensaje diciéndome que venía a casa de mis padres y termine accediendo a vernos fuera de aquí, si él hubiera ido a la casa de mis padres se hubiese encontrado con sus padres y lo último que necesito es que mis tíos y padres nos den algún tipo de sermón, aunque papá no estaba en casa.

Ahora no dejo de preguntarme ¿por qué accedí a verlo? Bueno, fue bueno verlo y hablar; por lo menos no peleando o no la mayoría del tiempo. Pero todo se arruino cuando él me beso y mi estúpido corazón comenzó a latir por ese estúpido beso, porque todo lo que paso fue estúpido, incluso yo soy estúpida.

Ross me pidió una oportunidad para nosotros, me hablo de ser mi esposo y me beso, todo eso sucedió en menos de diez minutos o ¿un poco más? No lo sé, solo sé que... no, no sé nada. Cuando llego a casa me bajo del coche y no espero a que Sam abra la puerta, me alegra tenerla cerca todavía y me entristece no tener también a Sally, ellas son mis chicas de seguridad pero con mi nueva mudanza no eran necesarias las dos y como Sally tiene familia decidí que lo mejor sería que ella se quede en casa.

Al entrar me encuentro con mis padres y por suerte los padres de Ross ya no se encuentran aquí, no es que no los quiera, es solo que últimamente ambos se encuentra un tanto... charlatanes, por decirlo de alguna manera. Hoy en cuento me vieron ambos me pidieron hablar y no me negué, pero lo mejor hubiera sido que me negara porque ambos me dieron una especie de "charla" de lo que debería hacer con Ross, lo que ellos quieren es que nosotros seamos una pareja feliz y casada, muy muy muy casada.

Este día fue agotador y lo único que quiero es llegar a mi cama para poder dormir doce horas, quiero que este día termine lo antes posible. Saludo a mis padres y les informo que me iré a dormir, les doy un beso a cada uno y cuando me acerco a mamá noto que ella no se ve muy bien, le pregunto si se siente bien y ella me sonríe para decirme que se encuentra completamente bien. La miro un tanto dudosa y ella me tranquiliza diciéndome que seguro se le volvió a bajar un poco la presión, le pido que se cuide y me alejo de ellos para poder subir a dormir.

Nunca Lo Imaginé ||Libro 3|| Trilogía Nunca ✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora