🌫️ c u a t r o .

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—¿¡muerta?! —preguntó con desesperación la madre de Amy, mientras la directora le contaba la situación. El lugar estaba lleno de policías, hasta ahora sólo le habían informado a la madre de la chica asesinada. No tardó en llorar y gritar con desesperación, quería entrar al colegio y asegurarse de que su hija no estuviera muerta, ya que claramente no creía tal cosa.

Pero así era, la habían asesinado.

Los policías detenían a la mujer para que no entrara, sólo se limitó a arrodillarse y llorar como nunca antes lo había hecho. ¿Qué había hecho su hija? Un alma tan pura y amigable, no merecía tal muerte.

—por favor, no... Mi pequeña no puede estar muerta, ¡no!

Forcejeaba para que la soltaran, la desesperación, tristeza, miedo, pánico y enojo que sentía era algo que no le deseaba a nadie. El dolor de una madre por su hija muerta.

La noticia se hizo saber y las clases se suspendieron solamente por tres días, algo incoherente pero era principio de clases, el año debía seguir y todos en la dirección del lugar se habían puesto de acuerdo, entre la directora y profesores.

Ya era un nuevo día, Brendon antes de salir para allá tachó el nombre de Amy, sintiéndose satisfecho. Una vez allá, sentía el clima tenso, varios habían faltado, lo cual era obvio, varios padres estaban asustados e incluso los mismos estudiantes. Nadie podía actuar del todo natural luego de lo que había pasado, todo el mundo se sospechaba entre sí.

Ahora esperaban a que uno de sus profesores entrara al salón, no hacían nada, estaban todos serios e incluso con ganas de llorar.

—¿quién pudo haber sido? —rompió el silencio una de las chicas del grupo, Hayley. Obvio habló como pudo ya que tenía un nudo en la garganta.

Todos los del grupo la miraron, estaban en una esquina mientras Brendon estaba en la otra, solitario. Tenía sus auriculares puestos, pero sin música, sólo fingía escucharla para poder escuchar lo que hablaban.

Luego de unos segundos, Patrick suspiró.

—no tengo idea.

—pero, ¿habrá sido alguien de acá? Q-quizás alguien de otro salón —preguntó con un poco de pánico Ronnie, mientras Lindsey movía la cabeza de un lado a otro, mordiéndose el labio inferior.

—no seas estúpido, ¿cómo va a ser alguien de acá? Quizás alguien entró a robar, entró por el baño y ella estaba allí.

—vamos, Lyn-Z, ¿qué mierda robarán aquí? ¿Las sillas? Para robar dinero siempre van a otros lugares, justo aquí no creo —respondió en un tono obvio una chica rubia, Nicole.

Dallon disimuladamente se limpió una lágrima, él no lo decía pero era muy sensible y le tenía un gran aprecio a Amy. Sólo suspiró y bajó la mirada.

—ya vuelvo —dijo de la nada Ryan, estaba asustado y quería despejarse un poco. Se levantó en dirección a la puerta pero una mano la detuvo.

Ronnie.

—¡no! Mira si te pasa algo, no seas estúpido, lo mejor es que estemos todos juntos.

Brendon estaba observando. Frunció el ceño y rompió el lápiz que tenía en la mano, su ira había vuelto. Ronnie lo había tocado, frente a sus narices.

—tranquilo, no va a pasar nada, en serio —le sonrió, zafándose del agarre con cuidado. En respuesta, luego de unos segundos, el contrario también sonrió como pudo. Ronnie estaba firmando su sentencia de muerte sin que se diera cuenta. Se habían sonreído. Brendon hacía lo posible para no perder el control.

❥ yandere ;; ryden-ishDonde viven las historias. Descúbrelo ahora