❥ yandere ;; ryden-ish

🌫️ d o c e .

Brendon podía jurar que el cuerpo de Elizabeth era más liviano de lo que parecía, pero no fue fácil llevarla hasta su casa, tuvo que llevarla en sus brazos mientras fingía preocupación, y si alguna persona preguntaba, sólo decía que se había desmayado e iba directo a su casa para que descansara y llamara a un médico tranquilamente.

Obviamente todo actuado, mintiendo descaradamente como bien había aprendido a hacerlo.

Sí le dolió bastante haber golpeado a Ryan de esa manera, es que era necesario, ¡no iba a permitir que una simple estúpida se le declarara frente a sus ojos!

Además convenientemente era de la rubia de quien estamos hablando, la que siempre había dudado de las actitudes de Urie, y eso llevaba sus duras consecuencias.

Me parece que todos a esta altura saben que quién duda de Brendon, o se entromete demasiado, desaparece sin dejar rastro, ¿verdad?

Cuando llegó finalmente a su casa, lo primero que pensó, fue en que ojalá Ryan estuviera bien, que alguien lo esté ayudando a poder despertar, estaba seguro que no lo había matado, por Dios, Brendon jamas mataría al amor de su vida.

¿O sí...?

Un suspiro de relajación se escapó de sus gruesos labios, siempre todo salía como él lo planeaba. Sí, a veces era difícil y pasaban cosas inesperadas, pero su objetivo final iba a conseguirlo, cueste lo que cueste.

Pero una cosa que era segura, era que la sanidad de Brendon era cada vez más y más fuerte, si llegaba a su punto máximo perdería el control por completo y sería capaz de hacer una locura.

Si creen que matar a todos para conseguir el amor de alguien que ni sabe quién eres es grave, imagínense de lo que Brendon sería capaz si pierde totalmente la cabeza, el sentido común y la razón.

Pero lo importante ahora era la ronda final, la más importante y por la que Brendon estuvo esperando durante meses; Elizabeth.

(...)

—ugh... —se quejó por lo bajo la castaña, al despertar lentamente.

¿Recuerdan en la situación en la que estuvo Ronnie cuando Brendon lo "eliminó de los planes"?

Elizabeth ahora estaba igual, sólo que en el sótano.

Amarrada con gran fuerza a una silla, totalmente indefensa, inmóvil y sin poder ver nada.

Sus muñecas comenzaban a doler, las cuerdas estaban muy firmes a su cuerpo para que no tratara de escapar. Comenzaban a ponerse rojas del dolor, sabía que dejaría marcas, al igual que sus tobillos.

Cuando pudo sentir bien cómo estaba su situación, entró en mucho pánico. Empezó a moverse desesperadamente, tratando de poder escapar de alguna manera, pero le era imposible, no sabía ni en dónde estaba. Todo era oscuro.

Aunque sí pudo sentir que era su fin.

Sus ojos se llenaron rápidamente de lágrimas, el mar salado no dudo en recorrer sus mejillas, mientras estas se ponían coloradas. No quería morir, rezaba para sus adentros con todas sus fuerzas que algo la salvara, que algún milagro sucediera.
Pero no pasaría, por más que lo deseara tanto, la suerte no estaba de su lado.

Tragó duro, mientras trataba de controlar su rápida y exagerada respiración, lo único que podía escuchar, muy apenas, era como si alguien estuviera afilando cuchillas, lo cual la hizo tensarse más, llenándola aún más de miedo, terror, escalofríos, espantosos pensamientos de qué era lo que iban a hacer con ella y porqué.

¿Qué podría haber hecho para merecer tal cosa? Se preguntaba al estar en esa situación, creo que cualquiera lo haría.

Pasaban varios minutos y nada, tenia un nudo tan fuerte en la garganta que no quería decir nada por si le hacían algo peor o algo, simplemente estaba demasiado asustada, pero pudo calmarse al ver que nada ocurría de momento. Por lo cual, cuando pudo tranquilizar su mente, se percató de algo que no se había dado cuenta, desde el momento que había despertado, por el miedo y la angustia, el olor que había allí donde estaba, era realmente asqueroso y putrefacto.