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Álex:

Decir que estaba emocionado era poco, se que no era normal que este emocionado por un simple juego de básquetbol, sobre todo porque nunca he sido amante de los deportes y apenas se en que consistía ese juego, pero con Máx habíamos entablado una bonita relación de amistad; si el esta feliz yo también estoy feliz.

Además a él también se le veía muy emocionado, si comparamos su emoción con la mía, la mía es como una hormiga frente a un elefante.

No paraba de hablar del juego (aún lo hace) hasta un punto que llegó a ser un poco irritante. Sin embargo eso me ayudó a comprender un poco más el juego, sigo encontrando los aburridos pero estoy emocionado por ir a ver a Máx jugar.

Hablando de eso, ayer me invitó a ver la práctica de hoy, miércoles.

Así que ahora me estoy dirigiendo a aula de Máx para ir a ver si práctica.

—Hola —salude cuando llegué a su pupitre, todos estaban tan apurados por salir que no me notaron siquiera entrar.

—Oh, hola —saludo más animado—. Espera que termine de ordenar mis cuadernos, por cierto puedes llevar esto a mi casillero—me tendió un libro—número 28.

Asentí y salí para dejar su libro de biología.
No fue difícil encontrar su casillero, no estaba "cerrado" así que solo lo abrí y meti el libro en su lugar.

Tras esto volví adentrarme en el salón, ya no habían tantas persona adentro (por no decir que quedábamos Máx, yo y un chico mas).

—¿Ya? —pregunte al acercarme otra vez.

—Si, ya —se coloca la mochila en sus hombros y salió, lo imite y ambos salimos rumbo a la cancha de básquet.

Estuvimos un rato caminando hasta que por fin llegamos, al entrar pude ver a varios alfas ya listos con esa ropa que usaban en los partidos.

Máx me dijo que vaya a las gradas ya que el tendría que ir al vestidor a cambiarse.

Como todavía no había partido hice lo mejor que podía hacer, entrar a YouTube.

Estuve un rato mirando, no más de 5 minutos cuando vi que Máx salía con su uniforme para el juego.

Me saludo de lejos y yo le devolví con una sonrisa.

—¿Es tu pareja? —escuche una voz desconocida que me hizo asustar. A mi lado había una chica, no tenía aroma que pudiera detectar así que supuse que era beta.

—No, es un amigo —respondi, ella tenía el cabello de color café oscuro sin parecer negro, sus ojos eran de un color avellana, por su color de piel y contextura supuse que no era de aquí, no lucia cómo alguien de aquí.

—Entiendo, soy Samira por cierto —asenti.

—Soy Álex —me presente de igual manera— ¿Tu por qué estás aquí?

—Mi tonto hermano insistió en que viniera, Máx nunca me había dicho que tenia amigos, me las pagará ese papanatas —rei ante su comentario, aunque me sorprendí mucho que fueran hermanos ya que no tenían nada en común.

—No parecen hermanos —comente—ademas el tampoco me ha hablado que tenía hermanos.

—Realmente no somos hermanos —aquello me sorprendió—nuestros padres se casaron asi que legalmente soy su hermanastra, pero somos hermanos de alma—comento lo último poniendo una mano en el pecho exageradamente.

—Vaya, supongo que vienes aquí por el juego, ¿Cierto?.

—Si, ese idiota no ha dejado de hablar de básquetbol.

ESTO ES IMPOSIBLE!!!-omegaverse hetero #BOK2019Donde viven las historias. Descúbrelo ahora