3 Historias de Kageyama Omega

AkaKageIwa: Parte 1

Narra Kageyama...

Las almas gemelas eran algo de lo que la gente hablaba todo el tiempo, pero como había llegado yo a estar en esta posición, estaba seguro que era una burla del destino.

Las almas gemelas tienen un lazo mental que se activa cuando se encuentran en un mismo lugar, y desde entonces no se pueden separar. Es sabido que cuando conoces a tu alma gemela, inmediatamente te tienes que ir a vivir con ella para que el lazo se haga más fuerte. Yo ya había visto antes a algunos de mis compañeros encontrar a sus almas gemelas, y podía decir que era algo extraño. Al momento en que se veían por primera vez, su cuerpo empezaba a doler, y solo se aliviaba cuando se tocaban, mientras el lazo se formaba, lo cual duraba un par de horas.

Yo no diría que soy exactamente envidioso, pero ser el único de Karasuno sin su alma gemela, y además ser un omega, me molestaba. Más por las burlas de Tsukishima y a veces de Hinata.

Siempre me pregunte como sería mi alma gemela, mi alfa. Lo que paso en una reunión con tres equipos, no me lo espere jamás en la vida.

Habíamos sido invitados a Nekoma, junto con Fukurodani y Aoba Johai, para hacer una practica conjunta de cuatro escuelas. Todo iba bien, habíamos calentado y saludado a todos. Como Nekoma tenia dos canchas, los cuatro equipos jugaríamos partidos "amistosos" al mismo tiempo. Nosotros por sorteo, jugaríamos contra Aoba Johai.

Estábamos en la cancha, y no sé por qué, mi mirada de repente se fue hacia el otro lado de la red, hacia Iwaizumi-san, Tsukishima y yo teníamos que bloquearlo, pero justo cuando iba a saltar, un dolor agudo me recorrió todo el cuerpo y en lugar de elevarme, caí al suelo agarrándome el estómago.

A través del dolor escuche muchos gritos, no solo de mis compañeros, sino también del otro lado de la red y de la otra cancha. Apenas moviéndome, intente mirar... lo que vi me sorprendió. 

Iwaizumi-san estaba tirado en el piso, igual que yo, y Oikawa-san y Kunimi estaban intentando ver cual era el problema. Al mismo tiempo, el partido entre Fukurodani y Nekoma se había detenido, y ellos estaban formando un circulo de un lado de la red, viendo algo que debería estar en el suelo. Daichi-san se acercó a mí, intento agacharse para ver que me pasaba, pero dos gruñidos resonaron en la habitación y él se quedó inmóvil. Mi dolor se hizo más fuerte, y cerré los ojos para evitar llorar, mi cabeza estaba dando vueltas...

- ¡Agarren a los dos y llévenlos con él! -Escuche a alguien decir o gritar.

Estaba a punto de desmayarme, y de repente, dos cuerpos fueron puestos a mis lados, sentí dos manos pasar por mi cintura, y el dolor se fue atenuando. Abrí los ojos, encontrándome con los de Akaashi-san justo enfrente, me volteé despacio, eh Iwaizumi-san estaba detrás de mí.

- ¿Almas gemelas múltiples? -Escuche a alguien preguntar.

¿Acaso eh encontrado a mi alma gemela? ¿Mi alfa? Pero... ¿Por qué hay dos? Akaashi-san es un alfa, e Iwaizumi-san también... ¿Acaso yo... tengo dos alfas?

Quise preguntar, pero lo único que salió de mi boca fue un quejido. El dolor no se había ido del todo aún, y mi cabeza seguía dando vueltas.

-No se queden ahí, levántense y vayan a la enfermería. -Un entrenador nos habló.

Yo quería levantarme, pero no sentía mi cuerpo, lo intente de todas formas, y parece que mis compañeros también. Mis piernas no me sostuvieron, estuve a punto de caer de nuevo, de no ser por dos brazos que me agarraron de la cintura.

-Tranquilo, te tenemos. -Iwaizumi-san me dijo, y entre él y Akaashi-san, me llevaron arrastrando a la enfermería.

Ni bien la enfermera nos vio entrar, salió de la habitación, dejando la llave en la puerta para que uno de nosotros pusiera el seguro.

Iwaizumi-san y Akaashi-san me sentaron en una camilla y al alejarse, una oleada de dolor me hizo doblarme. Creo que solté un quejido o algo así, porque al instante, dos manos se pusieron en mi espalda y el dolor se atenúo.

- ¿Kageyama-san, estás bien? -Me pregunto Akaashi-san.

- Sí... eso creo. -Le conteste, mi voz sonaba rota y muy afinada. - ¿Qué paso? –

- Bueno, parece que los tres somos almas gemelas. -Dijo Iwaizumi-san y yo me voltee para verlo.

- Pero, ambos son alfas. -Le replique, no podía tener dos alfas, ¿o sí?

- ¿Nunca oíste sobre las almas gemelas múltiples, Kageyama-san? -Me cuestiono Akaashi-san, y yo lo mire.

Tanto él como Iwaizumi-san estaban trazando círculos en mi espalda con sus manos, supongo que para relajarme.

- Sí, pero están formadas casi siempre por dos omegas y un alfa, o por un alfa, una beta y un omega. -Le respondí.

- Kageyama-san, las almas gemelas múltiples también pueden estar formadas por dos alfas y un omega. Son casos muy extraños, pero existen. -Me explico, intentando sonreír.

- Y parece que nosotros somos uno de esos casos. -Agrego Iwaizumi-san.

Realmente, esto no podía estar pasándome, sé que siempre pedí conocer a mi alma gemela, pero no esperaba tener más de una, y aunque fueran dos... ¡NO ESPERABA QUE LOS DOS FUERAN ALFAS! ¡¿COMO LIDIO CON ESTO?! El destino enserio se está queriendo burlar de mí...