La desesperación de Yamato.

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Cuando terminaron el desayuno, todos fueron camino a sus carpas debían guardar todas las cosas, a lo que Mimi guardó su ropa ordenadamente en su bolso y su saco de dormir. Luego ayudó a Yamato a guardar la ropa de él, ya que él estaría ocupado viendo lo del colchón inflable y desarmando las carpas con los chicos.

Una vez que terminaron, el primer grupo que se iba era el de Mimi con Koshiro, así que fueron en compañía de los demás hasta el bus, Yamato colocó el bolso de Mimi en el maletero y así volver donde ella, abrazándola con sumo cuidado.

— Quisiera irme contigo, Mimi-san. –Confesó Yamato, quién no quería despegarse de ella.-

— Tranquilo, Yamato-san, nos veremos cuando llegues, ¿Si?

— Lo sé, pero igual no quiero alejarme de ti. –Yamato sentía un sentimiento de aferro hacia Mimi, no sabía porque no quería dejarla ir.- ¿Y si pregunto si puede venir con nosotros?

— No te dejarán bobo, recuerda que vamos en clases distintas. –Confesó Mimi, mientras miraba fijamente a su mayor.- Ya debo subirme al bus, nos vemos en la preparatoria, ¿Si?

— Lo sé, pero podría intentarlo. –Susurró, inclinándose para depositar un beso de sus labios.- Te quiero mucho, pero mucho, nunca he querido alguien así. Y me voy a despedir de mi hermoso hijo. –Se agachó para depositar un beso en el vientre de Mimi, lo cual ella sonreía enternecida.- Cuida a mamá, ¿Si?

— Yo también te quiero demasiado, me tienes boba de amor, ¿Lo sabías? –Correspondió a su beso, para luego notar como depositaba el beso en su vientre.- Eres muy lindo, Yamato-san. –Susurró.- Ya voy al bus, te aviso cuando llegue.

— Avísame cuando llegues, ten cuidado, colócate bien el cinturón de seguridad y recuerda que te quiero.

— Sí, tranquilo y nos cuidaremos bien.

Mimi subió al bus junto a Koshiro, acomodándose en el asiento asignado y así colocarse el cinturón de seguridad. Esperaron unos minutos, lo cual comenzó arrancar el bus en el viaje de retorno.

Yamato se notaba inquieto, presentía algo raro y no sabía que podía pasar. Taichi junto a Sora notaban a este nervioso y se acercaron a él.

— ¿Qué pasó, Yamato-san? –Cuestionó Sora.-

— Me siento inquieto, siento que algo va a pasar y no quería que Mimi-san se fuera.

— Tranquilo, van de vuelta a casa, no le pasó nada en el campamento, menos le pasará en el camino. –Confesó Taichi, colocando su diestra en el hombro de Yamato.- Ya vamos, que debemos dejar las cosas en el maletero.

— Sí, gracias Taichi.

Los tres fueron en buscas de sus cosas, dejando sus bolsos, las carpas y el colchón inflable en el maletero. Esperando que viniera el bus que se los llevaría de camino a la preparatoria, lo cual no demoró en llegar y todos subieron a este. Pasaron unos minutos, lo cual partió su bus y Yamato se quedó en silencio mirando a la ventana.

Por su lado estaba Mimi junto a Koshiro apreciando la vista desde la ventana, notando la maravillosa vista que tenían, lo cual Mimi tomaba las fotografías con su móvil y luego se tomaron una selfie la cual se la mandaron a los chicos.

— ¿Qué harás en las vacaciones de verano? –Cuestionó un curioso Koshiro.-

— Iremos a la casa que hay en el campo donde viven los abuelos de Yamato-san, quieren conocerme y pasaré unos días allá.

— Que genial, pensaba que podríamos ir a las aguas termales todos juntos, ¿Te parece la idea?

— Oh hace tiempo que no vamos, quisiera ir a limpiar mi cuerpo y que me vaya todo bien ahora en adelante. Quiero ir a un templo para comprar un amuleto, ¿Habrá uno para bebes?

Amigos con beneficios [DIGIMON/MIMATO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora