Secuestros perfectos

capitulo 005||Segunda Víctima

–Muy bien chicos. Esta vez nos fue muy bien, debemos hacerlo mejor –dije mientras tomaba mi botella de cerveza.

–¿Cómo cuáles? –dijo curiosa Diane.

–Ejemplo, Cris, debes concentrarte mucho más. En medio del retiro te quedaste en blanco, eso nos hizo desperdiciar minutos que necesitábamos. Por lo menos la madre no te vio –dije serio apuntando a quien me estaba refiriendo. Este frunció el ceño.

–¿Disculpa? ¡Fue mi primera vez! –cruzo sus brazos arrecostando su hombro izquierdo a un piral el cual estaba a su lado.

–Ya dejen pelear por pendejadas y vamos a discutir quien será la segunda víctima. Además, debemos hablar del dinero de la primera víctima –dijo Diane levantándose de su silla e ir hacia un estante en dónde habían botellas de vino, dónde saco un saca corchos y saco el corcho el cual cerraba la botella de vino, dispuesta decidió agarrar la botella a tomar de ella.

–Es verdad, el dinero está en una cuenta anónima la cual hice, se le va a ser transferido a cada quien su parte. Mientras podrías hablar de cuanto ofreceremos esta vez –dije tomando de mi cerveza.

–¡Ya se! Seis millones de dólares –dijo la cifra con algo de ilusión.

Yo reí.

–Esta bien, no me quejo por la suma. Me tomé la molestia en elegir la segunda víctima –dijo Diane con un asentó elegante.

–Esta bien, dinos quien es –dije haciéndome a un lado.

Esta agarro un bolso el cual tenía papeles, fotos, todo en su respectiva carpeta.

–Sara Willson, una niña estadounidense. Su madre se llama Sophia Willson, una actriz poco conocida, pero también es escritora y pintora. Su padre Jhonatan Willson, arquitecto conocido, debemos siempre elegir que el padre o la madre se vaya de viaje. Esta vez, su madre irá a Brooklyn por un papel para aparecer en una serie, Daniel, te vas a aparecer en su hotel y yo me voy a aparecer en su casa junto a Cris, Cris, sabes lo que debes hacer –dije sacando fotos y pegandolas a la pared.

–¿Porqué siempre debo quedarme con el niño, porqué no quedarme con la madre la cual siempre eligen a la más buena? –dijo Cris algo confundido.

–Cris, por favor, no eres tan guapo como yo, no sabes coquetear, no eres sexy, en cambio, yo soy ardiente y sexy –dije haciendo gestos, mientras movía mis manos de forma elegante.

Pude escuchar las carcajadas de Diane.

–¡Ojalá! –exclamo sin parar de reír.

Cris, algo ofendido por mi comentario me lanzó uno de los papeles los cuales estaban en la mesa, agarre la hoja, empecé a cortar está hasta llegar a ser pequeños pedazos de hojas, las cuales tire al suelo.

–Daniel, deja tus pendejadas y págame coño, quiero mi dinero –dije agarrando los papeles para guardarlos nuevamente en la carpeta.

–Esta bien, hoy te transfiero, a Cris dentro de seis años –mire a Cris casi riendo.

Este se encontraba serio.

–¡Daniel! ¡Ya! ¡Págame mierda! ¿En serio uno tiene que ser grosero para que le hagan caso en este lugar? –dijo cruzando sus brazos algo cansado.

–Uy, disculpa señor educado –Diane rodo los ojos.

–Bueno ya, mañana nos volveremos a reunir, iré a ver a una amiga –dije acercándome a un espejo en donde acomodaba el cuello de mi camisa.

Diane frunció el ceño.

–¿Una chica? –se acercó a dónde estaba colocando sus manos al rededor de su cintura.

–Wow ¿Y esa inesperada reunión? ¿Van a cojer? –dijo mientras tomaba de su cerveza.

–La conocí en un bar, coje como una demonia, hoy la veré. Siempre me llama a las tres de la mañana a decirme que me va a exprimir. Eso me excita –me heche perfume, acomode mi cabello mientras agarraba las llaves de mi carro.

–Verga –exclamo Cris terminando su cerveza.

Diane, estaba callada, mordió su labio suavemente mientras miraba a otro lado.

–Esta bien, que tengas suerte vaquero –dijo mientras agarraba su bolso.

–¡Diane! ¿Y si vamos a comer algo? –se levantó de su asiento yendo hacia ella.

Esta estaba dirigiéndose a la salida, agarro la manilla de la puerta, volteo a ver a Cris.

–No –fue lo último que salió de su boca para después irse.