(Narra Mika)
Sigo sin saber el porqué Jeremy me levanto tan temprano solo a dejarme este mugroso papel. Esto ya era demasiado, además este piso ¡es imposible de limpiar!
He refregado varias veces y nada! Esa mancha seguía ahí. A quien diablos se le ocurría ocupar un piso blanco! Es lindo pero es un fastidio limpiar!
M: Maldita sea piso asqueroso— murmure entre dientes enojada por tantas veces que había refregado.
T: Vaya... se nota que le pones mucha pasión a tu trabajo — dijo una voz a mis espaldas, ya sabía perfectamente de quien era.
M: Ves que si? Yo amo limpiar— dije sarcástica.
T: Se nota... más vale termines rápido porque te quedan otra habitación más por limpiar y esta muy sucia como a ti te gusta.— sonríe
Idiota tendría que haber sido.
M: Querido Tyler — digo con voz dulce — podrías por favor salir de aquí y dejarme limpiar este cochinero en paz?
Él puso un cara de idiota y comenzó a caminar hasta la salida mientras yo soltaba un suspiro de alivio, ¿ven? A veces es mejor hablar las cosas con calma. Es mejor tener paciencia y lidiar con las cosas de manera simple... bueno, de la segunda manera simple que es hablando.
T: No. — cerro la puerta con ambos adentro.
Al carajo la calma, la paciencia y todas esas mierdas.
Me giró sobre mis pies escuchando la risa de Tyler detrás de mi, pero no me importa, sabrá que desobedecer a Mika tiene sus consecuencias y no son buenas.
Agarre uno de los baldes de agua sucia con la que ocupaba para limpiar aquel trapo de piso. Haciendo notar como que iría a tirarlo.
Sigilosamente me acerque a Tyler y ese maldito flojo seguía en su lugar sin querer moverse.
Tu te lo buscaste.
M: Ya sal de aquí!— digo al mismo tiempo que arrojo el balde de agua sucia sobre él.
Sorprendido se apartó con toda su ropa mojada y con manchas de mugre, tenía suerte de que también le llegó un poco en la cara.
T:¿¡ QUE TIENES EN LA CABEZA?!—
M: Cerebro, algo que a vos te falta —
T: Te gustan los chicos que aparecen mojados en las revistas verdad, si querías verme así, solo debías decirlo— dice viéndome divertido. Algo no andaba bien.
Al principio no captaba lo que decía, pero al final pude notar como la camisa se había puesto trasparente dejando ver un poco la piel de Tyler.
M: Ya lárgate de aquí! — grite evitando mirarlo.
Tome de la puerta y lo saque a la fuerza de la habitación que estaba limpiando.
Que asco... maldito Tyler.
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Las dos horas pasaron volando, las habitaciones... no es por presumir, pero las había dejado impecables solo arrojando agua a todo.
Camine por los pasillos de la casa dirigiéndome al salón de baile como lo había dicho ese infeliz que solo espero se esté muriéndo de frio y le de una fuerte gripa.
Por las escaleras podía ver a Ro y Naty en unos asientos separados de Tyler, que al parecer se había cambiado, Jeremy y Zioul.
Mientras ellos hablaban las chicas estaban sentadas incómodas y sin decir ni una palabra.
No dude y baje rápidamente llendo con ellas sentandome al lado de Ro que por lo visto podía notarse el cansancio en su rostro.
T: Tomen un descanso de 1 hora y después les diré que hacer.— elevo la voz sin siquiera mirarnos.
R: Esto es el maldito infierno, creo que voy a morir. — soltó un suspiro cansada.
N: Son unos tarados, solo míralos—
Giramos nuestras cabezas en dirección a ellos, mirando cuan aburrido estaban.
Z: ¿ Y si hacemos un muñeco?... — comienza a cantar
J: puede ser uno vudú...— le sigue
T: Somos tan guapos si... siento tres miradas de las chicas de allá...—
Volteamos rápidamente a lo nuestro ignorando a los mastodontes que al parecer se llevaban muy bien mientras seguían con su horrible canción.
M: Quiero hacer algo esta noche — digo frunciendo mis labios y al parecer había detenido aquella canción tan espantosa.
T: Pues duerme — me responde al instante y yo solo ruedo mis ojos — ¿Que? Estas a mi cargo. No te doy permiso de hacer nada esta noche que no sea estar sobre tu cama roncando.
M: Yo no ronco – me defiendo cruzando mis brazos a la altura de mi pecho.
Ro comienza a toser falsamente
R: Perdón — se aclara la garganta— me agarró tos de repente.
J: ¿Verdad o Reto esta noche?— pregunta.
N: No se que es eso, pero acepto. ¿Será en mi habitación?— pregunta sonriendo.
Z: ¿No vas a pedirme permiso? — pregunta Zioul sin ninguna expresión en su rostro.— Parece que tendré que refrescarte la memoria — se levanto de su asiento.
N: Maldito infeliz, ¡YA ENTENDI!— gritó enfadada mientras Ro y Yo solo nos miramos confundidas por aquella reacción.
Escuchamos la puerta abrirse y Sara ingresó al salón dirigiéndose a nosotros con una sonrisa como la que siempre traía.
S: Están tomando su descanso chicos?— todos asentimos— Como le están llendo a las chicas—
R: Muy bien, gracias.— respondió educadamente.
S: Necesito que los seis suban al último piso y limpien ahí, al parecer la antigua dueña tenía un laboratorio y ahora el nuevo dueño quiere donar eso a las escuelas, así que tengan cuidado.—
Que rayos es un laboratorio
Z: No se preocupe, iremos ahí ahora mismo.
S: Descansen un poco, yo me iré al pueblo por mis medicinas, así que les encargo el lugar chicos y cuiden a mis niñas—
J: Nosotros las cuidaremos, vaya con cuidado.
S: Volvere enseguida, solo tengan cuidado, puede que algunas cosas sirvan, no toquen las sustancias.
Mientras ellos hablaban, nosotras nos quedamos atónitas por ver aquel lado tan caballeroso de ellos.
Si que eran unas personas tan falsas.
Sara se despidió dejandonos con estos tres monstruos nuevamente. Con sinceridad preferiría largarme ahora mismo.
T: Vamonos trio de inútiles, Mika conmigo, Naty con Zioul y Jeremy con Ro, nos dividiremos en tres grupos.
Z: Jajaja eso será interesante.— sonrió ladino.
Sinceramente no se que había pasado con Naty y Zioul pero por primera vez había visto una cara de odio de parte de Naty, ni siquiera a mi me había puesto esa cara.
Como sea que hayan sucedido las cosas lo peor venía hora mismo.
Trabajar solas es una cosa, pero con ellos... quizás esa habitación no aguante lo suficiente.
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