Capitulo 18

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Entre al estacionamiento, estaba solitario a excepción por otros dos empleados que al verme suben.

Camino hacia mi auto y cuando voy a introducir la llave se me resbala, me hinque para tomarla y la voy a introducir de nuevo, doy un sobresalto al ver en el vidrio detrás de mi a Israel.

―Israel, me asustaste―digo con la mano en mi corazón, los latidos son agitados y me quedo sin aire, comienzo a reir, lo veo, pero sus ojos están rojos y llorosos ¿estuvo llorando?, su mirada es fría y se acerca a mi―, Isra...

―Por Vanessa―murmura con rabia
Me comienza a ahorcar y me hace difícil respirar, mi espalda choca con el auto y el me aprieta con más fuerza.

―Maldito seas―murmuro con rabia a centímetros de mi cara, su aliento apestaba a alcohol―, eres un maldito enano.

Cuando veo la oportunidad lo golpeo lo más fuerte que puedo en el rostro, destroce su ojo, sin embargo logra abrirlo, afloja el agarre de mi cuello y le doy un golpe en el abdomen, el retrocede y comienzo a tomar bocanadas de aire, lo miro y me hala del cabello, me golpea el rostro y busca ahorcarme de nuevo, pongo mis manos alrededor de su cuello y apieto con todas mis fuerzas su cuello y clavo las uñas, el retocede no antes de estrellarme contra el auto, logro incorporarme y comienzo a correr.

―No tienes salida―escucho que dice antes de que suene el disparo de un arma

Me lanzo sobre el suelo cubriendo mi cabeza, por suerte no me dio, la bala dio en uno de los autos, las alarmas de los autos comenzaron a sonar y volví a ponerme de pie, otro disparo, cerca de mi, a centímetros, me acerque al ascensor y no abría, la puerta junto a el tenia seguro, no tengo escapatoria.
Me oculto debajo de un auto y suenan tiros a mi alrededor, uno de los disparos da en el suelo cerca de donde estoy.

―Sal enano, ¿ahora no tiene las bolas que a Vanessa tanto le gustan?
Halo mi tobillo me golpeo con el arma en la cabeza.

―Por tu culpa, es tu culpa.

Me disparo a quema ropa en el hombro, di un grito de dolor.

―Eres un maldito niño, te odio, te odio―apretaba los dientes mientras hablaba, me escupió

Le di varios golpes en las costillas, en el abdomen y en el rostro, mis golpes no tenían tanta fuerza, él se reía de mis intentos, el dolor del disparo en mi hombro se intensifico cuando introdujo se dedo.

―No eres nada―dijo halándome del cabello

―¿Por qué?―pregunte con un hilo de voz

―Por qué te escogió como sumiso, quería dos sumisos, pero tu fuiste su favorito y me lanzo a la calle como un perro, no tenia para pagar la universidad, me había quedado sin nada, me dejo sin nada por tu culpa.

Llevo su mano a mi entrepierna y apretó mis testículos, di un grito de dolor, Israel llevo el arma a mi entrepierna.

―Vanessa dejara de amarte si no tienes esto―iba a jalar del gatillo si no fuera porque Susan lo golpeo con el extintor

―Jayson, ven, ven―me tomo y yo hice lo que pude para ponerme de pie, junto con ella cruzamos el estacionamiento

―¿Po-por donde entraste?, todo está cerrado.

―Vi todo por las cámaras, ya llamé a seguridad―el ruido de un disparo hizo eco en el lugar junto con el grito adolorido de Susan

El disparo le había dado en la pierna, ambos caímos de forma estrepitosa al suelo, a metros de la puerta, acorralados en una pared.

―Ella es inocente, tu eres el culpable de esto―dijo Israel

―Jayson―mi mirada viajo a la puerta a metros de nosotros, Vanessa se acerco a mi y palideció más al verme herido, a Susan junto a mi herida y a Israel acercándose con un arma―, Jay... Susan, ¡¿Por que?!―grita lo ultimo hacia Israel

―Porque tu no me amas, yo fui leal, estuve a tu lado, eres una malagradecida, arruinaste mi vida―dijo arrastrando las palabras―, por culpa de el, yo no puedo tenerte―dice y me señala con el arma―, ella... daño colateral, que pesara en tu conciencia.

Vanessa se pone frente a el protegiéndonos a Susan y a mi.

―V-Va-nessa, no... vas a reci-bir la bala―dije trabajosamente

―No importa―dice mirando fijamente a los ojos de Israel

―Eres tan estúpida como para morir por el―dijo y el puso el cañón en la cabeza de Vanessa

―No, n-no―digo

―Adiós zorra―un disparo, cerré mis ojos con fuerza, al abrirlos y busque a Vanessa, aun se mantenía de pie
Israel cayó al suelo y aleje de una patada el arma, detrás de él estaba K, con un arma.

Ella le había disparado a Israel, nos salvó la vida.

―Jayson―Vanessa une sus labios con los míos y nuestras lágrimas se mezclan en el beso, sus ojos negros están húmedos y las lágrimas caen sin control―, Susan...

―Llame a seguridad―Susan le da una sonrisa de boca cerrada

Al cabo de unos minutos llegan los de seguridad y las ambulancias nos llevan al hospital, K se quedó con ellos para explicarles todo lo sucedido a la policía.

Soy tu Sumiso © - Jayson Osborne ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora