¡Maldito Flechador! 젠장 "Kookmin"

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— ¿Estás seguro de que me veo bien?

—Estás un poco nervioso ¿no es así?

El peli gris asintió. Estaba dado por hecho que la invitación de JungKook era una cita y lo que menos quería dar era una mala impresión, comenzando por su gusto en elegir las prendas adecuadas.

No estaba convencido del todo aún, pero su hermano insistía que unos jeans y una camisa color rojo le sentaban a la perfección. Sumando que su frente descubierta le daba el toque final. Arregló el cuello de su camisa una última vez y suspiró mirándose al espejo.

—Lo haré bien.

—Sólo... no lo arruines.

—Ya que tú lo conoces mejor... — Su voz adquirió un tono de recelo. — ¿Qué es lo que debo y no debo hacer?

—Para iniciar, pregúntale cosas básicas para conocerlo mejor, pero sin hacerlo sentir acorralado, pregunta de tanto en tanto.

— ¿Es todo?

—No, esto sonará mal pero lo más importante es que finjas un poco. — TaeHyung frunció ligeramente el ceño sin entender a lo que su hermano se refería. — Es decir, si él dice que ama algún grupo en específico dile que a ti se te hace ciertamente interesante.

—Y si me pregunta algo cómo mi canción favorita ¿qué se supone que responda entonces?

—Dile algo como "conozco la canción, pero no se su nombre"

—Eres estúpido. — Río cabizbajo, pues a pesar de que las excusas de su hermano eran ridículas, también llegaban a funcionar incluso en las peores situaciones — Pero gracias por hacer esto posible.

🍒🍑

Estaba impacientándose rápidamente, no era la pérdida de tiempo, sino el miedo a que JungKook lo dejase plantado ahí.

Por alguna extraña razón el castaño no quiso pasar a su casa a recogerlo y ahora tenía que aguantar las ganas de llamarle, pues había conseguido su número telefónico a través de otra persona.

Pensaba que volvería respirar tranquilo después de que el castaño se apareciera en el lugar, pero como siempre, estaba equivocado.

Su respiración se volvió agitada y persistente al mirarlo caminando hacia dónde él. Vestía de una manera informal y no podía negar que esa faceta lo hacía verse más apuesto de lo normal. Se quedó tanto tiempo mirándolo sin siquiera darse cuenta que ya estaba sentado a lado sonriéndole ante su notoria acción.

— ¿Vas a mirar todo el tiempo? — Susurró en su oído haciéndolo estremecer.

Se maldijo internamente y pellizcó su propia pierna para devolverse a la realidad — ¡Soy un idiota! Lo siento tanto. ¿Vamos?

Las ganas de entrelazar sus manos estaban consumiéndolo por completo, caminar demasiado cerca de él no era suficiente. Quería llenarlo de preguntas para saber toda su información y al menos proclamarse, por ahora, como su mejor amigo; pero las palabras de JiMin retumbaban fuerte en su cabeza. No lo arruines.

El menor caminaba con las manos en sus bolsillos sintiéndose un poco asfixiado, se preguntaba a sí mismo si TaeHyung no conocía el espacio personal o algo así.
En parte se sentía mal por el chico, verdaderamente estaba ahí porque JiMin se lo había pedido y no porque le naciera invitarlo a lo que ahora el peli gris nombraba como una cita.

El silencio no ayudaba mucho a mejorar la situación y esperaba a que por lo menos, quién caminaba a su lado, dijera algunas palabras, pero claramente podía notarse que no tenía intenciones de ello.