ᴜɴ ᴏᴍᴇɢᴀ ᴘᴇʀᴅɪᴅᴏ [ᴏᴍᴇɢᴀᴠᴇʀsᴇ]

4. Tʀᴏᴘɪᴇᴢᴏs.

ᴅᴇᴅɪᴄᴀᴅᴏs ᴀ:
?.

ʟᴇᴠɪ:

Un nuevo espasmo me recorre desde la nuca y se detiene en mi columna donde segundos después termina por expandirse en todas direcciones. Un gemido de dolor intenta salir de mis labios, pero con rapidez llevo mi mano para ahogarlo.

¿Por qué está sucediendo esto? Tomé mis supresores y estoy usando un Synder que bloquea los olores, ¿por qué mis síntomas surgen?

La sensación de algo deslizándose por mi espalda me hace dar un brinco y girar mi cuerpo en su dirección. Asustado de que un Alfa haya decidido tocarme, alejo aquél brazo, pero en su lugar la chica pelirroja o mejor dicho de cabello naranja, me mira asustada.

—Tranquilo, soy yo —Vuelve acercar su mano y me da unas cuantas palmadas—. No he podido conseguir un supresor —avisa, haciendo una mueca lleva su mano a una de las bolsas de su suéter—. Mi celo es el otro mes así que no traje ninguno —Intento prestar atención, pero el pánico me está cegando por completo y sólo escucho a medias—. Son demasiados egoístas algunos Omegas; cuando se trata de ayudar a uno de los suyos son indiferentes —masculla entre dientes

Había escuchado decir a mi madre algo similar: “No confíes demasiado y tampoco esperes ayuda de los de nuestro rango, aun ellos pueden darte la espalda”. No creí mucho sus palabras en aquel entonces porque no había pasado por algo similar. Ahora que estoy en medio de mi celo, me doy cuenta: ninguno de ellos me ha podido dar un simple supresor… ¡Es sólo uno! No necesito y tampoco le voy a exigir el bote completo.
Supongo que las miradas maliciosos no eran sólo de los Alfas.

—Tu aroma no se detiene —me observa con tristeza. Ante esa mirada siento que estoy a punto de llorar por el enojo de no poderme controlar—. Creí que si te hablaba te iba a tranquilizar un poco —murmura decepcionada. Su expresión se vuelve pensativa durante varios segundos y después se levanta decidida—. No te preocupes, iré a buscar ayud… —Antes de que dé un paso más por impulso mi mano se aferra a su brazo—. ¿Levi?

Desde hace años no he estado solo durante mi celo en un lugar público. Hanji siempre ha estado a mi lado para salir de la situación, pero ahora que ella no está me siento muy asustado. Me he vuelto dependiente a ella de forma inconsciente y lo odio, en verdad, odio depender de alguien más, pero el miedo es mayor que mi valentía.
Ella se ofreció ayudarme, no sé su nombre, pero en estos pocos minutos se ha mantenido junto a mí. Temo que si se va, algo me pase.

—Perdón —murmuro y suelto su brazo—, lo hice sin querer —miento con la voz temblorosa.

—Tranquilo, traeré ayuda —Sonríe.

—¿Y si me llevas contigo? —pregunto un poco aliviado al pensar que puedo salir de aquí.

—Lo siento —Alcanza mi mano y la sostiene entre la suya—. Tengo un amigo Alfa, se llama Erd —Saca el móvil de una de sus bolsas y lo mueve un poco—, él me sugirió mantenerte aquí, la puerta está al otro extremo, dónde la mayoría que están allí son Alfas que ya han sido afectados por tu olor —Le da un apretón a mi mano—. Si te llevo conmigo, es seguro que te atacarán.