Dinos que ya no tienes miedo,
No te vamos a creer.
Te has levantado la falda.
Y has echado a correr.
Te has lavado los pies en el lago.
Y no nos dijiste.
A nosotros, tus héroes,
Que tardarías más de un mes en volver.
Dinos, tú, la de la flor en la cabeza
Qué se siente enjuagarse las raíces.
Donde a tus otros hermanos.
Le han cercenado las manos.
Tú no lo sabías muy bien.
Tu corazón salvaje no te dejó ver.
Y no escuchaste a quienes tenías que entender.
Que por el amor de un amigo te podías perder.
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Perenne
Poesia"Aprendimos a ser eternos. A seguir aquí milenio tras milenio. A quedarnos quietos por siempre. Y a amarnos como nadie. Y aunque fuimos rebeldes. Lo hicimos bien. Aprendimos a dormir del lado correcto de la cama. Con la cabeza abajo, o arriba. De...