V.

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Durante el primer bloque en la mañana, la directora entró al aula en la que se encontraba Robert, James y John anunciando que dentro de unos días el equipo de baloncesto se enfrentaria a Salesian, causando con aquello reacciones exhaltadas por parte de los chicos.

— La recompensa será el trofeo de primer lugar y cada alumno del equipo ganador obtendrá un paquete sorpresa que de seguro les gustará, — Dio aviso la señora y apuntó a James — Y tu, Page, tendrás un rol importante en esta competencia —
La mujer procedió a entregarle un papel al mencionado, el cual daba aviso de que este tendría el rol de tomar fotografías para el periodico de la ciudad.

— ¿Por qué yo? ¿Cómo sabe que me gusta la fotografía?—
— En esta escuela tarde o temprano se sabe todo, créeme — Dichas estas palabras la mujer salió del aula, dejando a todos con diversos temas para hablar.

Por su parte, Page aún estaba extrañado respecto a lo de fotografía, cosa que apenas sabían John y Robert. Aún así decidió hacer como si no hubiese escuchado nada para no tener estúpidas preocupaciones. De igual manera era reconfortante para el chico saber que podría usar uno de sus talentos ocultos, pensaba que la gente al ver los diarios diría "Que buena foto, quiero saber quien es el que está detrás de esto, nadie podría igualar tal bella técnica", entonces decidió que asistiría al día del partido para fotografiar a un grupo de jóvenes correr tras un balón. Consideraba una idiotez eso de los deportes con balón pero sabía que era cosa de cada uno, al menos así podría mejorar su técnica y tomar fotos aún más bellas durante los atardeceres.

Quedaban ya apenas un par de días para el partido, Robert junto a James y John estaban en el baño de la escuela fumando y tomando fotos de cualquier estúpidez. El humo abarcaba todo el lugar, habían dejado con seguro la puerta para que nadie se encontrara con un trío de adolescentes fumados en exceso.
James se encontraba a cargo de las fotografías mientras que el otro par simplemente eran ellos mismos bajo el efecto del humo.

— Esperen, debo ir a buscar más papel para la cámara, se agotó — Interrumpió James.
— Voy contigo, en mi casillero tengo más hierba — Sugirió Robert, recibiendo un sí por parte de Page.
— Vayan ustedes, quiero quedarme en el suelo un ratito — Bonham se acomodó como si fuera un bebé apunto de dormir y los chicos salieron en busca de lo mencionado.

— Mira ¿Cuál debería llevar? — El pelinegro observaba los pequeños cartuchos de su bella cámara.
— Lleva el pack de 2 — Robert se acercó a Page y lo encerró como siempre entre sus brazos — Recuerda que necesitarás más para el partido.
James solo se dejó llevar por aquellos ojos color esmeralda del rubio y comenzó a besarlo como si nunca lo hubiera hecho.
La distancia entre ambos ya no existía, ahora solo quedaba la duda por parte de James, quien aún no aclaraba si el rubio le gustaba. Robert ya lo tenía más que claro. Para el, mirar aquellos ojos achinados lo era todo, expresaban soledad y tristeza, paz y amor. Sentía como si lo conociera de otra vida casualmente, como si estuvieran hechos el uno para el otro y que aún se debían una vida juntos.

— Robert — Interrumpió James.
— ¿Si? —
— ¿Te gusto? —
— ¿Qué pregunta es esa? Claro que me gustas, de no ser así no te estaría besando como un desesperado — Ambos rieron y se dieron un último beso para volver con John.

Era una tarde de Junio, los jugadores y profesores, padres y todos los que apoyaban a un equipo de jóvenes se encontraban en las gradas gritando distintos tipos de cosas y así alentar a sus cercanos. Sería un partido importante esta vez ya que tendrían premios prometidos si es que ganaban, entonces aquello los motivó a jugar en su 110 por ciento.

James, como se había comprometido, estaba por las esquinas de la cancha tomando fotografías a los jugadores. Estaba siendo un buen partido, los espectadores no despegaban la mirada del balón y quien lo llevaba. En el momento lo controlaba Robert, entonces James tomó de inmediato las fotografías del rubio para luego mirarlas en su casa.

— ¡Y los Hotchkiss ganan! —. Anunció con emoción el presentador luego de que John Bonham anotara aquel punto ganador.

Las personas gritaron felices y emocionadas, el equipo de Robert y John ahora se abrazaban entre todos y compartían distintas opiniones respecto a como habían jugado los de Salesian. James se acercó a su novio y lo abrazó y dejó besitos por todo su rostro. Page no estaba feliz por el hecho de que habían ganado, si no que le gustaba ver a sus amigos felices.

En su casa, el pelinegro  estaba tomando un zumo de naranja sentado en su cama y miraba dudoso la cámara, entonces la tomó y comenzó a ver las fotos atentamente.
Que buen fotógrafo soy, no me lo esperaba de ti James Page — Habló para sí mismo y apareció una fotografía de Robert sonriendo al final del partido. El pelinegro sintió algo extraño dentro de el, como una felicidad mezclada con ternura y serenidad. Observó aquellos rulos y la forma en que caían sobre sus hombros, los cuales se veían debido a las cortas mangas de la camisa y también dejaban ver una parte de la atractiva espalda de este.
Entonces James se dio cuenta de lo que sucedía. Le gustaba Robert, aquel rubio sin camisa con el que se había encontrado en el baño cuando estaba de visita, el que robaba durante las fiestas, el que jugaba basquet, el que coleccionaba vinilos robados. Le gustaba incluso la manera en que sus pestañas se movían cuando este parpadeaba.
Entonces se le ocurrió la grandiosa idea de escribir todo lo que le gustaba de Robert entre otras cosas.

Este es Jimmy Page y hablaré sobre lo hermoso que es un chico llamado Robert Plant.
Cuando está fumando hierba siempre cierra sus ojos al botar una bocanada de sus delgados labios, es como si sintiera la forma en que el humo le llena sus pulmones. Cuando juega basquet, al terminar el partido o cuando toma un descanso se tira al suelo y puedo ver su respiración agitada. Cuando nos besamos el toma con delicadeza mi rostro y su otra mano por lo general la deja sobre mi cintura, me parece demasiado lindo, creo que me gusta o incluso podría decir que estoy enamorado. No es como si nos hubiésemos besado muchas veces, pero ahora me siento así, cada beso es especial desde aquella fiesta.

You could be mine; JimbertDonde viven las historias. Descúbrelo ahora