III.

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El timbre sonaba y el montón de alumnos inundaba los pasillos de la escuela. Todo era colorido, hoy se celebraba el aniversario de aquella conocida escuela y debido a eso todos llevaban disfraces de cualquier tipo.

— No puedo creer que te veas tan bien en esa ropa, Roger — Plant miraba las ropas que traía el pequeño rubio y reía.

— ¿Tiene algo de malo? — Acomodó su oscura falda la cual le llegaba sobre sus rodillas, traía medias negras con unas calcetas blancas y largas, una blusa blanca y corbata bicolor. Lo que más resaltaba era su maquillaje, sus piernas y su peluca rubia.

— Claro que no, yo si te doy — Respondió Robert.

— Ni te atrevas a tocarme — Advirtió peligrosamente Taylor — Estarás muerto si lo haces.

— Bueno, si te emborrachas podría ser diferente ¿no? — Habló de manera sensual pero sin dejar el lado cómico de la conversación.

De pronto se acercaron John y Jimmy tomados de las manos. Ambos lucían completamente felices y enamorados como una pareja de película Disney o algo así.

— Ey ¿Estarán en la fiesta esta noche? — Habló Roger.

— Solo si puedo cojer a Rogerina — Bromeó Robert recibiendo risas de todos a excepción de "Rogerina".

— Estás muerto idiota, no te darás ni cuenta de cuando llegue mi venganza — Se defendió Taylor.

— Si si como digas nena — Bromeó nuevamente sin tomar el peso de las palabras de Roger.

La fiesta principal sería en el gimnasio de la escuela y todos estaban reunidos ahí. Habían disfraces de todo tipo, desde princesas Disney hasta el monstruo del lago ness. Robert no tenía ningún disfraz, Jimmy iba vestido de un diablo, John estaba vestido de vaquero y como ya sabemos, Roger iba por la vida vestido de colegiala, atrayendo consigo miradas de chicos y chicas, incluyendo profesores pero este no le daba importancia.

De pronto Page notó que en el pequeño grupo de baile que se había formado faltaba uno, Robert Plant. Se decidió por ir a buscarlo y para su sorpresa, al encontrarlo estaba husmeando entre los bolsos acumulados de los alumnos quienes bailaban distraídos al ritmo de la música.

— ¿Qué buscas ahora? — Preguntó seriamente Jimmy.

— Cigarrillos — Respondió mientras sus manos estaban en la cartera de una chica.

— Yo puedo darte uno, tengo una cajetilla justo acá — Sacó lo mencionado y sonrió junto con Plant.

Ambos salieron del lugar y se fueron a los baños como de costumbre. Jimmy revisó la cajetilla y notó que solamente había un cigarrillo.

— Hay un problema — Le mostró la unidad de tabaco — Solo tengo uno, pensé que habían más. Seguramente John los sacó sin mi permiso.

— Simple — Dejó el cigarrillo entre los delgados labios de Page y acercó el encendedor — Vamos, dale una quemada.

El pelinegro afirmó e hizo lo que Robert le dijo — ¿Ahora qué?

— Damelo — Plant le quitó el cigarro y lo dejó sobre sus labios, se acercó al rostro de Page y votó todo el humo en la cara de este — Lo compartimos.

Jimmy estaba algo avergonzado, sentía que de alguna manera estaba engañando a John aunque no fuera así. La mirada de Robert lo hacía sentirse nervioso, agregando que estaban dándose besos indirectos en cada quemada que le daban al cigarrillo.

— ¿Por qué crees que estás enamorado de mi mejor amigo? — Preguntó Robert.

— No lo creo, estoy seguro de que estoy enamorado — Le dio una quemada al cigarrillo — Es lindo, es tierno y atento, habla sobre cosas divertidas y... no se me ocurre algo más.

You could be mine; JimbertDonde viven las historias. Descúbrelo ahora