VI

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Habían pasado apenas un par de meses desde que James escribió aquella pequeña confesión y la mantenía escondida en un bolsillo secreto dentro de su bolso, el cual el mismo había creado con una navaja mientras estaba aburrido en clases. Cada vez que este se sentía desanimado leía aquel papel y recordaba lo feliz que estuvo esa vez y así subía sus ánimos, cosa que su novio aún no sabía y siquiera tenía la más mínima idea de lo que sucedía entre su pareja y su mejor amigo.

Bonham y Page se encontraban caminando por el centro comercial, habían pasado ahí luego de la escuela para ir por un refresco y pasar el rato, ambos sabían que se aburrirían demasiado en sus casas como para ir de inmediato a ellas.
Ambos pidieron una bebida sin bombilla plástica y se sentaron en un pequeño parque que se encontraba en la parte trasera del centro comercial.

— Ey ¿Qué piensas de Robert? — preguntó John, causando una incómoda reacción en James.
— Es un idiota, pero es agradable al mismo tiempo, ya sabes — contestó el pelinegro.
— Claro, es un idiota, no entiendo como lo he soportado todo este tiempo — dijo John — supongo que eso hacen los amigos de verdad.

Al mirar aquella serena sonrisa en el rostro de Bonham, James se sintió automaticamente sucio y traidor ya que sabía que lo de encontrarse a escondidas con Robert lo seguía haciendo. Podía evitarlo, pero no lo lograba por el hecho de que disfrutaba más los besos del rubio que los de su novio, agregando que sonreía más y disfrutaba más el tiempo cuando estaba con este.

— John, debo ir al baño — dijo James — no me tardaré nada.
Dicho esto, el pelinegro partió al lugar que mencionó y Bonham se quedó con los refrescos y los bolsos de ambos cuidandolos. De pronto se le ocurrió la idea de dejarle un pequeño papel en la mochila a James el cual dijera algún mensaje tierno o simplemente un "te quiero". Comenzó a buscar un lápiz y dio con un pequeño agujero que estaba bien escondido, lo revisó y se encontró con la carta de confesión de Page. Al principio miró confundido el papel y luego lo abrió.
Con un dolor inmenso en su corazón leyó cada una de las palabras escritas, era definitivo, James se estaba confesando al rubio con aquellas dulces palabras.

Al terminar de leer la carta quedó atónito, no podía creer lo que estaba leyendo y miles de cosas pasaron por su mente en aquel momento. ¿A su novio le gustaba Robert? ¿Lo había engañado? No tenía nada claro, y recién se enteraba de lo sucedido en aquella fiesta. El chico se decidió por dejarla tal cual como estaba para el momento en que llegó James.

— ¿John, te encuentras bien? — preguntó Page.
— ¿Desde cuando estás enamorado de mi mejor amigo? —
— ¿Qué? — James sabía que seguramente había encontrado esa nota y sus nervios se apoderaron de todo su cuerpo.
— ¿Desde cuando estás enamorado de Robert? — Insistió John — ¿Al menos planeabas decirmelo?
— John, no es lo que piensas —
— ¡Cierra la boca! — exclamó Bonham mientras sostenía su cabeza con sus dos manos.

John estaba completamente enamorado de Jimmy Page, cada uno de sus movimientos y sus palabras, sus expresiones y la forma en que reía, todo de el lo tenía cautivado. Sabía que lo que estaba enfrentando en el momento era una infidelidad por parte de Robert, su mejor amigo de hace años y su novio, pero no podía echar todo a perder por una simple carta. Ablandó su lastimado corazón y habló;

— Jimmy, está bien, es solo un malentendido — se acercó al pelinegro y pozó una de sus manos en el hombro del otro — tu no podrías engañarme y menos con Robert ¿no es así?

James estaba paralizado, ahora era el momento de decir toda la verdad y acabar con aquel calvario de una vez. Pensó que seguramente Bonham tendría sus buenas razones para ignorar aquello y con inseguridad, respondió;

— Nunca podría hacerte algo así, menos a ti — notó las miradas de las personas que pasaban cerca de ellos, todos murmuraban cosas inentendibles pero ambos trataban de ignorar aquello.
— Lo sabía — Bonham besó a su novio y lo abrazó, decidió confiar en aquellas palabras que le dieron ilusión a su corazón. Trataba de no pensar en aquella carta que de seguro eran mentiras y trató de relajarse.

Robert se encontraba en su habitación escribiendo algunas canciones que nunca saldrían al aire y era acompañado por una botella de whisky y música de fondo. Imágenes de Page pasaban a cada instante por su mente y este solo sonreía. En realidad eran muy pocas las veces en que este se sentía mal por Bonham pero no era que no le importara, si no que enfocaba sus pensamientos en el lado positivo de todo esto, osea, James correspondía a su amor con besos y sonrisas aquellas tardes y noches en que se veían a escondidas.

— ¡Ya llegué! — exclamó John interrumpiendo la tranquilidad del rubio desde el otro lado del cuarto.
— ¿Cómo te fue con Jimmy? —
— Las cosas estuvieron algo complicadas — contestó el chico — pero no entraré en detalles, de todas formas ya se arregló.
— Oh, es bueno saberlo, si que se aman — replicó el rubio.

Robert guardó su cuaderno, se dirigió al sillón y se acostó en este mientras veía a John prepararse algo de comida en la pequeña cocina.
— ¡Yo también quiero! — exclamó con una sonrisa en el rostro.
— Idiota, no sabes lo que estoy haciendo, desde ahí no puedes ver — respondió el castaño.
— A la mierda con eso, tengo hambre —
— Oh, por cierto — habló Bonham — hoy se me acercó un chico en el receso y me pidió que nos juntaramos mañana con el —
— Si si, ahí lo veremos.

James se encontraba en la cornisa de un edificio cualquiera, gustaba de mirar su alrededor desde la altura ya que de alguna forma le traía más claridad a sus pensamientos. Las luces nocturnas de la ciudad le provocaban un sentimiento de lejanía, de nostalgia.
Esta vez se le estaba haciendo muy difícil. Sabía que debía alejarse de Robert para poder mantener una relación normal con John y su mente tenía todo claro, el problema aquí era su corazón, su imaduro y terco corazón que le decía que se quedara con el rubio.
Aún pensaba en que su novio había encontrado la carta y se le hacía muy extraño que lo haya dejado pasar como si una infidelidad fuera poca cosa, lo tranquilizaba un poco, no quería terminar de tal manera las cosas con Robert y John, menos acabar con su amistad.



Buee son las 5 y media de la mañana y recién subí el capitulo lol.
Espero que les guste, sip.

You could be mine; JimbertDonde viven las historias. Descúbrelo ahora