Guárdalo. » MONSTA X.

Devuélvelo;; Jookyun.

Se enamoró a primera vista. Y esperó, ya que en un segundo su corazón fue robado. Toda su atención girando entorno a aquellos orbes oscuros y aquellos surcos cerezas que se mostraban en una sonrisa acompañada de dulces hoyuelos.

Maravillado por aquel sonreír tan llamativo, e incluso tintado de vaga inocencia, se encontró sonriendo de vuelta. El chico lo miró, Im Changkyun rozó el cielo con sus manos trémulas.

"Hola, nunca te había visto por aquí" comentó la causa de su repentina timidez, y él sólo atinó a mirarlo. Notando que sin la necesidad de tocarlo, aquella piel pálida se veía—y sentía—suave en demasía. Sus propias mejillas quemando al ser consciente del silencio que los envolvió.

—Me mudé hace tres días—le respondió. El corazón bombeando velozmente.—, Im Changkyun.

Y tras una corta reverencia, admiró como una mano se extendía frente a él. Y aún nervioso, y algo tembloroso, la tomó. Aquel simple contacto entre pieles le ardió, enviando miles de sensaciones por todo su cuerpo, haciéndolo retener su respiración.

"Lee Jooheon, un gusto" soltó el contrario. Sus cabellos oscuros peinados suavemente hacia atrás, causando que cayesen con delicadeza sobre su frente. Sus ojos cafés profundos y tibios escrutándole superficialmente, su mano reteniendo aún la del contrario.

Changkyun juró en su interior que nunca podría ver de cerca a alguien tan precioso como Lee Jooheon.

Incluso el aroma de la brisa era perfecto, y él no pudo contenerse. Su cabello algo despeinado por el viento era tan hermoso para él. Y no pudo ocultar las estrellas que bailaron en sus ojos emocionados.

Sus labios sellados, pero con una sonrisa en ellos. Sus manos aún juntas, ninguno terminaba el contacto. Aquel chico era lo que siempre buscó, era lo que siempre anheló.

Y Changkyun pensó, que enamorarse era algo superficial y tonto. Pero, ¿cómo podría él ignorar el cosquilleo en su piel o aquella sensación molesta en su pecho y parte de su estomago?

"Eres muy lindo, Changkyun. Espero encontrarte por aquí pronto" murmuró el de cabello azabache, presionando la mano que aún retenía, mientras se tomaba el descaro de besar fugazmente la enrojecida mejilla del menor. Soltándolo, yéndose.

Dejando a Changkyun en medio de una cafetería, avergonzado, desorientado y con ganas de recuperar el corazón que él solía poseer. Pero que al parecer, aquel desconocido se llevó consigo.

Dejándolo perdido, enamorado.