Indefinite

17- Me muero por besarte.

Nos separamos por falta de aire. Abri los ojos, me observaba entre feliz y sorprendido.

- Eh...yo...c-creo que... debo irme.

Soy estúpida y claramente no es una pregunta.

- Qué?

- Debo irme.

- Debes o quieres? -lo miré pensativa. Ni siquiera yo lo sabia-

- Supongo que quiero irme -me encogí de hombros- Aunque también debo hacerlo, debo irme.

- Por qué? Te juro que no entiendo, Maira. Acabamos de besarnos, me parece que hay que hablar.

- Pero...

- No importa si te escapas hoy, de todas formas terminaremos hablando sobre esto. Entonces, por qué hacerlo más difícil? No te vayas, hablemos.

Él tenía razón, y me molestaba que sea así.

No podría escapar siempre.

- Tienes razón -suspiré pesadamente-

- Vamos -empezó a caminar asique lo seguí. Se sentó en debajo del primer árbol que vio-

- Ven, siéntate.

- Ok... De que...Ehh... De que quieres hablar?

Estúpida. Eso es lo que eres.

Maldita voz indeseada.

- Necesito que me digas que pasa.

- Qué pasa?

- Si.

- En realidad, no lo sé, James.

- Maira... Yo sé perfectamente que eres muy orgullosa y muchas cosas más, esta bien? Y si no me equivoco, estás intentando ignorar esto.

- Qué quieres decir?

- Quieres ignorar lo que sea que estés sintiendo, no es así? -tragué en seco-

- Escucha... Sinceramente no estoy muy convencida de que me pase algo como lo que te pasa a ti.

Mientes. Deja de pensar y admite que te gusta.

- Teniendo en cuenta lo que me dijiste hace rato -agregué-

- No te creo.

Haces bien en no creerme.

- Eso no es problema mío.

- Dime la verdad, Maira. Estoy cansado de estas constantes idas y vueltas.

- No es mi problema que no me creas.

Ya basta, Maira.

- Según tú, se puede odiar y sentir algo por alguien a la misma vez. Y esperas que me lo crea?

Es exactamente lo que te pasa a ti, idiota.

- Es la verdad.

- Yo no voy a creer eso.

Deja ese maldito orgullo una sola vez en la vida y dí la verdad, maldición!

- Te estas contradiciendo sola. Sabes que es cierto porque tu misma estas viviendo lo mismo que yo, Maira. El hecho de que me hayas seguido el beso hace rato lo demuestra.

Tiene razón y lo sabes. No hiciste nada para separarte, te encanto ese beso.

Maldita voz que me dice todo lo que no quiero oír.

Sin embargo, es cierto.

- Admitelo. Hazlo de una vez, Maira. Dime la verdad... -pidió-

- La verdad... -susurré más para mi que para él-