SAKURA-M.YG~P.JM-(omegaverse)

❁ジス❁

"Tengo miedo, de que nuestro amor no sea lo suficientemente fuerte para estar a tu lado..."

Sus cejas estaban fruncidas, su olor potente era camuflado por el ambiente, su realidad estaba dispersa y solo le importaba el papel frente suyo junto a un bolígrafo que tiraba tinta de vez en cuando trazando letras perfectas, unos que otros tachones o también trazos que su dueño hacía para no perder la concentración.

"¿Que tan prohibido es nuestro amor?... no quiero descubrirlo" 

Paso saliva olvidándose de todo, de sus problemas, de su alrededor... pero su dirección estaba dirigida entre todo ese público que pasaba desapercibido en la pareja que se mantenía unas mesas más adelante a el.

JiSu, sostenía fuerte la mano de su amada mientras la otra le contaba alguna cosa trivial entre sus labios rojos y brillantes.

"No quiero soltarte... jamás pensé en hacerlo"

Y una oración al aire fue trazada entre ese papel que YoonGi había extrañado tanto ver.

Hace mucho que no le había dado tanta vuelta a ese tema y menos escribirlo para una canción  futura, amor prohibido... amor irreal, parejas ilegales.

Pero cuando por accidente, llegó a esa cafetería que pasaba desapercibida en la ciudad y se encontró con nada menos que con esa pareja peculiar, contuvo mucho sus ganas de lanzarse entre ellas y pedirles que escribieran de pi a pa su relación de contrabando.

Porque en algún punto, cuando era pequeño se lo había cuestionado, pero no pasaba más allá de "imposible" para un YoonGi de 10 años, eso era un suceso meramente imposible.

Y solo le tomó un antojo de café expreso para darse cuenta que no lo era, que dos omegas son capaces de amarse mutuamente, de ser pareja y aspirar a más.

El no fue partidario de la jerarquía en la sociedad, alfas teniendo el control todo el tiempo, betas manteniendo a las empresas móviles y omegas siendo máquinas de cachorros. Y ahora implementando a los híbridos como afrodisíacos, como si fueran el pecado andante... 

La selección natural podía irse al carajo.

Nunca juzgo a un ser por su posición, por su estabilidad económica y mucho menos por algo tan trivial como gustos musicales.

Porque él vivió rodeado de eso, de etiquetas.

Entre más poderoso era igual a más aceptación social, y entre más pobre o trivial ni siquiera daban un pie en lo que había sido su casa.

Y cuando fue a Seúl, se dio cuenta que al menos había conocido gente de todo tipo, se había desintoxicado de tanta estrechez y banalidad de donde había vivido. 

Jisu fue una de ellas, donde si no tenías la última temporada de ropa no podías ni siquiera cruzar palabra con ella. Sin embargo YoonGi se dio cuenta de su cambio.

Hace mucho que no la veía, que no la analizaba.. ahora paso de tener las escrituras de la cafetería en sus aretes lujosos a salir de cita con un pantalón de mezclilla y un suéter largo gris de lana.

El no lo sabe muy bien, tal vez se abrió la mente la empresa de su padre en quiebra, o la mujer que estaba frente suya... pero JiSu había dado un cambio... para bien, con ella misma.

"Cambie por ti, me quedaré aquí y moriré por ti" 

YoonGi dejó el papel olvidado cuando miro la figura de la chica poniéndose de pie llevando consigo una vaso con un caramel macchiato casi terminado, llevaba en la otra mano su celular recién apagado y cargó con ella la mochila de hombro para después acercarse a JiSu y darle un dulce beso en sus labios.