SAKURA-M.YG~P.JM-(omegaverse)

❁遅かれ早かれ❁

Una.

Dos.

Tres veces esos colmillos fueron clavados en el cuello del híbrido de gato cuando la madrugada parecía no tener fin, y aunque la primera fue decisiva y la oficial, YoonGi no quedó con las ganas de marcar al omega a su antojo, mordiendo una y otra vez cada que él junto al menor llegaban al clímax de cada relación.

Decir que JiMin no estaba agotado era una gran mentira, sin embargo, cada vez que un pequeño lapso de descanso terminaba y Min YoonGi regresaba con los gruñidos territoriales y besos en su cuello, no era capaz de decirle un no al alfa que tenía encima.

Sin embargo, cuando los dos cayeron en la última ronda y el sueño gobernó los dos cuerpos, no pudo evitar caer en cansancio mientras sentía entre sueños, como el alfa se acurrucaba junto a él abrazándolo y abrigando en las mantas calientes.

Lo último que sintió antes de caer dormido, fue las constantes caricias que el alfa le daba en su espalda baja y los besos ligeros dejándose en su cabello rosa.

Y sinceramente, estaba seguro que dormirá unas horas más si no fuera por que los cánticos de las aves fuera de su casa molestaron su placentero sueño haciendo que frunciera el ceño con molestia y gruñó con pereza.

Arrastró su cuerpo desnudo entre las sábanas hasta que tuvo mucho más contacto con el mayor, aún sin abrir sus ojos, sus manos fueron tentando hasta que pudo engancharse arriba de las cintura del alfa y volvió a sentir calidez en su cuerpo somnoliento.

Su alfa eran tan calientito...

Su alfa...

JiMin abrió los ojos de golpe al pensar esa oración y lo primero que obtuvo fue la luz entrando a sus retinas quemandolas, de inmediato las cerró con una mueca pero poco a poco, fue abriendo sus ojos claros mientras sus manos aun tocaban en torso del mayor.

Y cuando por fin pudo ver con claridad, volteo a mirar al alfa donde estaba a su derecha suya, este aún se encontraba dormido, se encontraba completamente calmado al igual que su respiración, la luz le daba por su perfil derecho y JiMin claramente podía contar cada pestaña del mayor, era tan bonito... su piel tan clara y su nariz tan pequeña.

JiMin pensó que podría pasar por omega con solo ver su rostro, pero su cuerpo destina madurez y compleccion de alfa, al fin y al cabo lo acaba de marcar unas horas antes.

Sonrió con ternura pasando su mano a acariciar muy ligeramente el mentón del alfa que tenía marcada, se veía tan Pacífico. Su otra mano fue por instinto a su cuello sintiendo un poco de ardor donde la cicatriz apenas fresca se situaba, un brinco en su vientre y pecho se detonó dentro de JiMin y tuvo que morder sus labios antes de reír emocionado y enamorado como lo que era.

Sin embargo, su silencio y paz fue roto por el sonido de un celular de YoonGi sonando en alguna parte de la habitación asustando y quitando de inmediato sus manos de donde estaban hasta esconderlas en la sabana.

Cerró los ojos cuando sintió que el alfa se movía aún con el sonido del teléfono, fingió que aún dormía cuando el mayor, se estiró en la cama y gruñó con pereza como justo él lo había hecho.

Aún con los ojos cerrados, unas manos fuertes rodearon su cintura jalandolo más hacia yoonGi donde cuando el teléfono dejó de sonar, el alfa abrazó fuerte a su omega tratando de quedarse dormido una vez más.