CAPÍTULO 40 FINAL 2/3

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—Fuiste tu Christopher, tu lo hiciste— gritó el menor mientras se limpiaba las lágrimas

Aquel grito provocó que el castaño se preocupara, nunca imagino que algún día el rizado se daría cuenta de la identidad de su agresor, por lo cual no estaba preparado, no sabía que decir, solo se limitaba a balbucear

—Joel puedo explicártelo— dijo con un tono nervioso —de verdad, quiero que me escuches

El mentón del ojimiel temblaba al igual que sus manos, una extraña corriente viajó desde su cabeza a los pies y casi provoca que se desmaye

Mientras tanto el menor solo negaba con su cabeza intentando hacerse a la idea de que no es real lo que estaba pasando, si era un sueño quería despertar en ese maldito momento y respirar profundamente al saber que solo era una pesadilla, pero para su mala suerte, no lo era

Aquello hacía que su corazón se estrujara con fuerza hasta hacerlo añicos, quería gritar y salir corriendo de ese lugar, pues no soportaba estar frente a su amado y su agresor al mismo tiempo

—Solo escúchame por favor amor, es muy difícil de explicar pero lo haré —replicó el castaño

—No lo hagas por favor —exclamó envuelto en lágrimas el mexicano —No lo soportaría, ya me lastimaste mucho

—Lo sé y por ello te pido perdón, nunca me alcanzará la vida para tratar de recompensartelo, pero quiero estar ahí para ti

—Yo no quiero que me recompenses nada, ¿solo quiero saber por que a mi?, ¿de todos los seres humanos sobre la faz de la tierra que pudiste tomar, por que me elegiste a mi?

—No tuve elección, se que no tengo justificación, pero no estaba en mis manos, fue una tarea, tu ya estabas en la lista negra y fue mi tarea hacerlo, pero yo NO PUDE HACERLO, NO FUI CAPAZ

Aquello pareció irritar al menor, pues su expresión cambió, ya no estaba presente ese brillo y esa energía que emanaba de Joey, se había tornado oscura 

—Debiste haberlo hecho, hubieras terminado tu maldito trabajo y me hubieras ahorrado mucho —susurró el ya mencionado con la vista al suelo

—Y-yo t —el ecuatoriano fue interrumpido por un grito del mexicano 

—¿TIENES IDEA DE LO QUE SUFRÍ? TODO LO QUE ME HICISTE ME HA ATORMENTADO DURANTE TODA MI VIDA, VIVO ATERRADO Y ESTOY SUFRIENDO POR TU CULPA —Gritó Joel tan molesto que golpeó la mesa de centro que se encontraba a su lado y quebró el cristal

Los pequeños fragmentos rasgaron la piel de la mano del menor, haciéndolo sangrar, este al ver lo sucedido intentó limpiarse la herida, provocando que las gotas cayeran al suelo, como lo hizo una vez el cuchillo que fue clavado en su interior

—Joel por dios estas sangrando, déjame ayudarte —dijo inmediatamente el castaño mientras sujetaba la mano del ya mencionado

—No, por favor aléjate de mi, no quiero tu ayuda —exclamó mientras se apartaba 

—No te vayas por favor, llamaré a una ambulancia 

El mayor se dio la vuelta y tomó el teléfono para pedir auxilio medico, sin embargo el rizado no quería estar ahí, había sido un golpe muy duro y no podía seguir viéndolo a los ojos, no ahora 

Poco a poco el ya mencionado fue retrocediendo con paso lento, su mirada estaba fija en las acciones del ecuatoriano, veía como llamaba, lo miraba con su vista congelada, su corazón rápido palpitaba y sus ojos tan abiertos solo mostraban un sentimiento, miedo 

Chris al levantar su mirada de nuevo pudo observar la expresión de su chico, estaba aterrado, tanto que se había paralizado, pero sabía que en cualquier momento comenzaría a correr, solo bastaba pronunciar su nombre 

VIVIENDO EN OTRA PIEL - VIRGATODonde viven las historias. Descúbrelo ahora