Estaba oscureciendo ya y la dulce pareja estaba en su habitación. Destino estaba con la computadora haciendo unos trabajos y Félix estaba leyendo Wattpad por su teléfono.
ㅡListo, ya terminé.
Pensó el demonio.
Quería mimos de su pareja, así que llamó su atención. Este aunque hiciera varios intentos, falló.
ㅡFélix, me das mimos?~
Un puchero ligero pero adorable salió de parte del peli-morado.
Viendo que su pareja hacía omiso caso, fue por él y le sacó el celular.
ㅡDestino, me devolves mi celular?
El demonio negó.
ㅡLe haces más caso a esta cosa que a mí, ahora haceme mimos.
ㅡBanca que quiero terminar el capítulo. Es importante.
Destino se fijó en lo "importante" del capítulo y es que en el fanfic estaban por tener relaciones, a lo que el alto quedó estupefacto.
ㅡDevolvemelo porfa, no ves que Jeon y Min están por hacer el frutifantástico?
Destino se tentó con la nueva palabra dicha por su pareja, nunca se rió tanto en su larga vida demoníaca.
ㅡTe lo devuelvo, si me prestas atención y de una vez me das mimos.
Félix asintió resignado, aunque en el fondo si queria darle mimos a su pareja así que con gusto lo hizo.
Luego de un tiempo, Destino, se quedó dormido mientras abrazaba a Félix. Este solo sonrió embobado y con las mejillas coloradas.
Su pareja era todo un reto, y a veces se comportaba como un bebé haciendo un berrince, pero Félix así lo amaba.
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