La familia Malfoy mejor que la familia De'Ath. Ja los malfoy nisiquiera les llega a los talones...
Venus De'Ath la única pequeña consentida de su familia. Venus espera con ansias su carta para el colegio hogwarts de magia y hechicería.
Los probl...
Era el unicornio. Venus jadeó y se tapó la boca con ambas manos. Era lo más hermoso y triste que había visto. Sus patas estaban dobladas en ángulos extraños, y su melena caía desparramadas sobre las hojas
De repente, un sonido de algo deslizándose los hizo congelarse. Un arbusto cercano se agitó. Harry atrajo a Venus hacia él, protegiéndola. Entonces, de entre las sombras, una figura encapuchada se acercó gateando, como una bestia al acecho. Harry, Venus y Fang permanecieron paralizados. La figura encapuchada llegó hasta el unicornio, bajó la cabeza sobre la herida del animal y comenzó a beber su sangre
Fang salió corriendo. La figura encapuchada levantó la cabeza, mirando directamente a Harry. La sangre del unicornio le chorreaba por el pecho. Se puso de pie y se acercó rápidamente hacia ellos. Ambos estaban paralizados del miedo.
Venus pensó en lo que le dijo a Malfoy, dementor, y se maldijo por nunca a ver aprendido hacer ese hechizo totalmente complicado, su abuelo se lo había enseñada hace mucho por el tema de que en la casa habian pero Venus nunca tuvo un pensamiento bastante feliz para lograrlo.
Harry gimió y retrocedió, cegado por el dolor. A Venus sin importarle la criatura, se arrodilló para ayudar a Harry.
Se escucharon cascos golpeando a sus espaldas, y algo saltó limpiamente y atacó a la figura.
Venus trataba de ayudar a Harry, pero el dolor era insoportable. Un rato después el dolor se calmó. La casi castaña lo ayudó a pararse. Lo tomó del rostro con ambas manos, examinándolo. No tenía idea de qué podía hacer. Se fijó en la cicatriz, que en ese momento parecía fresca.
Lo único que se le ocurrió, fue dejar un beso ahí, que duró unos segundos. Cuando se separó, Harry la miraba embobado.
—¿Están bien? —ambos se sobresaltaron. Era un centauro. Harry tomó la mano de la chica.
—Sí.. gracias.. ¿qué ha sido eso? —dijo Harry.
El centauro no contestó. Tenía ojos asombrosamente azules, como pálidos zafiros.
—Tu eres el chico Potter —dijo—. Pero a usted no la conozco, señorita. —añadió mirando a la chica.
—Venus De'Ath —
—Es mejor que regresen con Hagrid. ¿Pueden cabalgar? Así será más rápido... Mi nombre es Firenze —añadió mientras ambos chicos subían a su lomo. Harry al frente y Venus detrás, abrazándolo. Recargó su barbilla en su hombro.
Del otro lado del claro llegó un súbito ruido de cascos al galope. Ronan y Bane aparecieron velozmente entre los árboles, resoplando y con los flancos sudados.}
—¡Firenze! —rugió Bane—. ¿Qué estás haciendo? Tienes a humanos sobre el lomo! ¿No te da vergüenza? ¿Es que eres una mula ordinaria?
Estuvieron un rato discutiendo
Firenze comenzó a caminar. Habló con Harry acerca de la piedra y los peligros, pero en esta ocasión, Venus no quiso participar.
—¡Chicos! ¿Están bien? —dijo Hagrid llegando del sendero.
—Estamos bien —respondió el azabache por los dos.— El unicornio está muerto. Está en ese claro de atrás
—Aquí es donde los dejo —murmuró Firenze, mientras Hagrid corría a examinar al unicornio—. Ya están a salvo.
Ambos se deslizaron del lomo. Venus temblaba un poco.
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Volvieron al castillo. Venus tomó a Harry del brazo, aún algo asustada. Al entrar a la sala común, encontraron a Ron dormido y a Hermione en proceso. Cuando los despertaron, se sobresaltaron. El azabache dejó a su amiga en el sofá, y Venus se abrazó a si misma. Empezó a contar todo lo sucedido.
—Así que lo único que tengo que hacer es esperar que Snape robe la Piedra —continuó febrilmente Harry—.. Entonces Voldemort podrá venir y terminar conmigo... Bueno, supongo que Bane estará contento.
Hermione parecía muy asustada, pero tuvo una palabra de consuelo.
—Harry, todos dicen que Dumbledore es al único al que Quien-tú-sabes siempre ha temido. Con Dumbledore por aquí, Quien-tú-sabes no te tocará. De todos modos, ¿quién puede decir que los centauros tienen razón? A mí me parecen adivinos y la profesora McGonagall dice que ésa es una rama de la magia muy inexacta. -
Ron y Hermione subieron a sus dormitorios, un rato después. Harry suspiró y observó a Venus dormida. Había tenido tanto miedo de que le pasara algo. Estaba debatiéndose si despertar a su mejor amiga, o llevarla con él al dormitorio. Decidió lo segundo.
La tomó en brazos, y lentamente fue subiendo las escaleras hasta su habitación. La dejó en su cama. Fue directo al baño a cambiarse. Al volver, abrió la cama para tapar a Venus, pero encontró su capa invisible, cuidadosamente doblada junto a una nota.
Por las dudas.
La guardó en su baúl y se acostó. Dejó las gafas en la mesita de noche, arropó a Venus y se durmió.
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Para Venus le fue difícil concentrarse en los exámenes. Aveces tenía pesadillas por lo ocurrido en el bosque, pero aún así, estudiaba lo más que podía.
Hacían exámenes teóricos y prácticos. Utilizaban plumas anti trampas
Su último examen fue Historia de la Magia. ¿Quién querría aprenderse el nombre de cientos de personas que ya murieron? Bueno, tal vez fueron importantes en su momento, y sería bueno conocerlos, pero de ahí a aprendérselos, no gracias.
A Hermione le gustaba volver a repetir los exámenes, a Venus igual, pero en menor medida. Fueron hacia el lago y se dejaron caer bajo un árbol. Venus dejó su cabeza en el regazo de Harry, mientras cerraba los ojos, disfrutando la tranquilidad. El azabache la observaba.
—Basta de repasos —suspiró aliviado Ron, estirándose en la hierba—. Puedes alegrarte un poco, Harry, aún falta una semana para que sepamos lo mal que nos fue, no hace falta preocuparse ahora.
Harry se frotaba la frente.
—¡Me gustaría saber qué significa esto! —estalló enfadado—. Mi cicatriz sigue doliéndome. Me ha sucedido antes, pero nunca tanto tiempo seguido como ahora.
—¿Quieres otro beso? —le preguntó Venus mirándolo desde abajo. El azabache se sonrojó y empezó a tartamudear. La casi pelinegra sonrió. Sabía que se avergonzaría y le divertía un poco. Hermione los miraba sonriente y Ron pues.. es Ron.
—Creo que es un aviso.. significa que se acerca el peligro —dijo Harry volviendo a su color normal.
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