En frente de la luz del atardecer que ocurría justo después de su graduación y la de sus amigos, Naruto empieza a darse cuenta de que estaba tan cegado en sus problemas personales y en el presente, que jamás llegó a tener preocupaciones.
La vida se...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—Naruto... —susurró Sasuke. Quería hablar con él, pues acababa de sentirse apenado por lo que sería de su futuro, ya que a diferencia de todos sus compañeros, jamás se le había ocurrido hablar de cómo sería éste, pero el chico estaba demasiado centrado en no preocuparse por lo que tendría que hacer mañana, y en su próximo suspiro ya se encontraban dentro del establecimiento nocturno.
El ambiente oscuro y a la vez iluminado de la discoteca se le hizo a Sasuke como un golpe suave a sus pupilas, que junto con las luces flasheantes de diversos colores cálidos y fríos aunque a la vez oscuros, más la música popular que sonaba y que a la gente le encantaba, mezclaba una combinación que le envolvía de euforia y transportaba a todas las veces anteriores que se había divertido en aquella discoteca. Siempre que entraba, se acordaba del popurrí de emociones que había vivido allí, como la vez que Sakura se enfadó con un guardia porque éste no paraba de lanzarle cumplidos que empezaban a molestarla a pesar de intentar resistirse, o cuando un extraño derramó su bebida en Sasuke y Naruto se peleó con él por aquello, pero esas situaciones fueron unos de los pocos problemas que tuvieron ahí, porque estaba claro que no todo de las vivencias era diversión y felicidad. Aún así, aquellas experiencias tan problemáticas no dejaban de ser otras más de la vida, y de hecho la mayoría de ellas las recordaban con un cierto aire cómico, quizá hasta nostálgico.
También le venía a la mente que siempre que terminaban un curso de clase, iban al mismo lugar a celebrarlo. Para ellos no era sólo una simple discoteca, era un almacén de recuerdos. Y sin embargo, justo ahora le dio por pensar que iba a ser su último día ahí.
Su última noche con Naruto en un lugar cargado de emociones.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
