You And I ➳ Carl Grimes

Capítulo 18: Belleza

°B R O O K E°

Rápidamente me gire hacia donde se encontraba el chico de ojos color cielo, había sido tan ingenua, la bala había caído en su rostro, precisamente en su ojo derecho, la sangre manchaba su rostro y caía hasta su cuello.

—Carl —pronunció Rick antes de que el susodicho cayera inconsciente al suelo.

El hombre corrió hacia su hijo, inmediatamente lo sujeto en sus brazos. Mamá, Michonne y yo estábamos perplejas por el suceso. No era capaz de que algo saliera de mi boca, lagrimas amenazaban en salir de mis ojos. ¿Por qué él?, no había ninguna necesidad de que esto pasara.

Empezamos a ir a la enfermería, nosotras limpiamos el camino, mientras el hombre seguía cargando a su amado hijo. Cuando llegamos al lugar, velozmente subimos las escaleras y entramos al sitio. El mayor de los Grimes dejó a su progenitor en la camilla, Denise lo miró sorprendida, empezó a preparar algo para salvarlo.

Me aproxime él, la sangre brotaba de su herida, su cabello castaño estaba completamente mojado, su boca se encontraba entre abierta.

—Carl —hable con voz quebrada —. Por favor despierta. ¡Me prometiste que siempre estarías para mí!

Mamá me abrazó haciendo un en vano intento de que me calmara. 

Lo apreciaba, en este mes se había ganado mi cariño, es una persona totalmente magnífica, hizo una promesa para mí.

Las lágrimas lograron salir de mis ojos, el adolescente estaba muriendo, no había seguridad de que Denise lo salvara, ¿por qué nos pasaba esto a nosotros?, en mi mente no cabía que Carl Grimes muriera.

Me aparte de mamá, limpiando las lágrimas de mi rostro, me arrodille junto a la camilla, levante mi mirada; Michonne tenía la mano en su boca, seguramente para encubrir sus llantos, Rick estaba perplejo, llevaba sus brazos a su cabeza en signo de frustración, esa acción me recordó demasiado al joven inconsciente, Melissa estaba ayudando a Denise a preparar lo que era necesario para que Carl saliera con vida del lugar.

—Te quiero —murmuré tomando su fría mano que colgaba de la camilla.

No me importo las miradas de extrañeza y confusión de los demás, al decir verdad, lo único que me importaba en estos momentos era el chico que estaba acostado.

—¡Rick! —gritó una y otra vez Michonne.

Divise al rizado sacando su hacha de su cinturón, abrió la puerta y salió por esta. Quería vengar a su hijo.

—¡Necesito que presiones la herida! —vociferó Denise.

La mujer de rastas no le prestó atención, salió de la misma forma que Rick lo hizo anteriormente.

—Los ayudare —aviso mamá yendo tras los dos adultos.

—Ven, pon las manos aquí —indicó la rubia —. Se repondrá.

{...}

Ya el sol había salido, la luna y las estrellas ya se habían ocultado. La guerra había finalizado. Carl estaba vivo, actualmente se encontraba en una habitación con su padre, estaban intercambiando algunas palabras, me encontraba a unos metros del cuarto sosteniendo a la pequeña Judith.

—Ve, a Rick no le importara —dijo la morena tomando a la bebé rubia de mis brazos.

Asentí con la cabeza y fui hasta la puerta.

—Pero hoy... vi lo que podían hacer, lo que podíamos hacer si trabajamos juntos —empezó a decir el mayor de los Grimes cuando puse mi espalda en la puerta —. Reconstruiremos la muralla, la agrandaremos, habrá más, tiene que haber más. Todo eso de lo que hablo Deanna es posible.