Capítulo 7

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Ya era casi media noche cuando Byul llegó a casa de su madre y en todo el camino no había dejado de pensar en aquella pelinegra que la tenía tan desconcertada. La actitud de esta última tenía bastante inquieta a la rubia, sentía como si hubiera visto dos caras distintas de su cuñada en una sola noche, primero esa actitud tan provocativa con la que la había recibido y luego esa actitud tan distante con la que se había despedido. Por más que lo intentaba, no lograba entender que estaba pasando.

Al abrir la puerta su madre la esperaba.

-¡Hija hasta que por fin llegaste, ya me tenías preocupada!-

-De verdad lo siento mamá. Es que se me olvidó avisarte, pero fui a dejar a Yongsun a su casa y ella me invitó a pasar a su apartamento para tomar algo, estuvimos conversando y no nos percatamos de que se había hecho tan tarde-

-Oh, ya veo. Bueno mi vida la próxima vez por favor acuérdate de por lo menos enviarle un mensaje a tu querida madre-

-Claro que si mamá, disculpa. No debiste quedarte esperando-

-Hija, de todas formas no hubiera podido dormir tranquila sin saber nada de ti. Pero bueno, ya es tarde, así que ahora si me voy a dormir. Hasta mañana mi amor, que descanses-

-Gracias mamá, tu igual-

La señora Jaeyoung se despidió de su hija dándole un beso en la frente, Byul se dirigió a su cuarto y se recostó en su cama algo agotada. De nuevo sus pensamientos estaban ocupados por la pelinegra, las imágenes de esa noche daban vueltas una y otra vez en su cabeza y por más que lo intentase no podía dejar de pensar en ello. Quería poder descifrar que era lo que había pasado, pero simplemente no lo lograba, ninguna conclusión venía a su mente, estaba completamente bloqueada. Poco a poco el cansancio fue ganándole terreno a sus pensamientos hasta caer rendida en un profundo sueño.

En cierto apartamento, una pelinegra no corría con la misma suerte, se encontraba sentada en el piso de la sala donde momentos atrás había recibido la visita de la mujer que tenía su cabeza hecha una tormenta. Trataba de buscar mil respuestas que simplemente no hallaba, ¿Cómo era que todo había ocurrido tan pronto? ¿Por qué se había despertado en ella ese repentino sentimiento? ¿Qué era lo que tenía esa rubia de especial que la tenía de esa manera?... Era claro que esa mujer tenía muchas cualidades, solo con su belleza y su personalidad bastaba, pero… ¿De verdad eso era suficiente como para que ese sentimiento naciera sin importar que se trataba de la hermana de su prometido? ¿Del hombre que le había demostrado su amor de mil formas y que estaba dispuesto a todo por ella?... ¿Qué iba a hacer ahora? ¿Qué haría cuando los tuviera a los dos frente a ella? ¿Podría controlar sus emociones hasta el final? ¿Será algo pasajero? ¿Una simple confusión?... Tantas dudas, tantas inquietudes que no la dejaban en calma.

La noche transcurría y ella seguía sin cerrar los ojos, el sueño parecía haberse esfumado, solo una profunda angustia y preocupación la embargaba, y no tenía ni la más mínima idea de cómo lidiar con todo aquello.

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El amanecer llegó y en casa de los Moon un desayuno en familia se llevaba a cabo. Madre e hijos se encontraban en la mesa departiendo juntos a primera hora del día, tal y como solían hacerlo tiempo atrás, cuando los chicos estaban en el colegio o en la universidad y su madre les preparaba un nutritivo desayuno antes de partir a sus actividades. El estar juntos de nuevo y poder revivir esos viejos momentos los llenaba de felicidad, un ambiente de alegría y armonía se respiraba en aquella casa.

-¿Y cómo les fue a Yongsun y a ti ayer Byul?-

-Bueno... Nos fue muy bien Minhyuk. ¿A que no adivinas?-

Mi Querido Amor [MoonSun] CompletaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora