Sesenta y dos

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Quizá ya una semana desde su ida al hospital, de su accidente, y después de haber presenciado a sus nietos abrir los regalos de navidad, tendría una semana más de descanso.

Debía recuperarse sí esperaba volver al trabajo dentro de esos siete días.

Y sólo en casa, era el día de Bruno, relajarse era el único plan dentro de las próximas veinticuatro horas.

Su hijo se encontraba repartiendo la mercancías en los lugares dónde solía hacerlo. Y llegaría quizá por la tarde, sí no empeoraba el trabajo podría llegar por la noche.

— Es hora de... — dijo el hombre mirando a su alrededor —, No sé. No tengo nada que hacer.

Fue a sentarse al sillón a descansar mientras miraba televisión.

Counting stars (Freddedy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora