Capítulo 11: Unidas nadie nos para.

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POV Robin

Cuando era pequeña tenia una particularidad, todos hacían lo que les decía, no porque me quisieran o porque fuera alguien importante, sino porque nadie se podía negar a mi porque sabia algo de ellos, algo que nadie quería que otros supieran, era un diario andante, pero uno que podía usar en su contra.

Cuando conocí al hombre con quien salía mi madre solo pude pensar en lo que podría hacer, no soy malvada, pero en verdad tenia planes mucho mas interesantes con esa persona, investigue todo lo que pude de Dragon, supe que tenia 3 hijos. Era dueño de casi ¼ de la ciudad, sus hijos eran unos mimados que gozaban de una vida de lujos.

Cuando los conocí supe inmediatamente que me odiarían y siempre quise que fuera de esa manera, disfrutaba poder callar la boca de los que me juzgaban, mi madre compro un par de acciones de Dragon para poder ayudarlo en la empresa, el accedió y con eso me puse a trabajar de joven.

Comprendí de negocios, tratos, contratos, entre otras cosas, con ello a mis 15 años tenia amplio conocimiento del negocio. Dragon comprendido eso por ello no me había dado ninguna acción, nada a mi nombre, era un peligro para él, sus hijos lo sabían...excepto uno.

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-¿Quieres trabajar en la empresa?- Cuando Luffy llego a mí con esa propuesta, jamás creí que fuera cierta.

Ace siempre llegaba a mi pensando que yo lo había convencido a Luffy de que me diera esa empresa, Sabo se mantenía imparcial, en aquel tiempo Luffy era como un niño pequeño que debía cuidar, siempre de fiestas, salidas, disfrutaba casi toda su juventud.

-¿Por qué? Bueno eres mi hermana y te quiero-

Esa fue su respuesta cuando le pregunté porque me había dado la empresa, nunca le creí aquella respuesta.

-¿Por qué le mientes a tu hermano?- Pregunto Koala quien me rodeo con sus brazos, jamás había experimentado el amor, de hecho, mas que amor me gustaba el saber que tenia control de una persona, verla llegar al punto de rogar por algo que solo yo podía ofrecer.

-Koala...hace tiempo tuve una visión...algo tan grande y creo que él es el único que me podrá llevar a esa meta- Dije con una sonrisa, ella solo me dio un beso en la mejilla.

-Solo lo quieres porque es una herramienta- Cuestiono ella.

-Simplemente soy como soy, pero, eso es lo que te gusta ¿no?- Lleve mi mano por debajo de su playera, llegando a tocar uno de sus suaves pechos.

-No estoy...segura- Dijo ella casi con un gemido.

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Secreto Entre DamasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora