Te conocí en un Oxxo- Catradora

Despertar

Adora camino hasta la puerta. Frente a ella se alzaba una gran casa, una que solo podía pertenecer a alguien de alta sociedad. Ella sabia de quien era y quería hablar urgentemente con la dueña del lugar.

En cuanto tocó la puerta una mujer alta y elegante le abrió, la mujer llevaba el pelo de color lila y una gran sonrisa, la había reconocido. Adora la miró con seriedad, estaba ahí para hablar de Glimmer, ya no soportaba la actitud de la chica y sabia que para cambiarlo tenía que hablar con su madre.

-Buenos días Angella- Saludó Adora, extendiendo su mano.

-Hola Adora- Angella aceptó el saludo- Glimmer esta en la casa de su novio.

-De hecho, venía a verla a usted.

-Oh- La miró con curiosidad, se apartó de la puerta como una invitación a entrar- ¿Qué quieres hablar conmigo?

-Es sobre Glimmer-Llegaron a la sala y se acomodaron en uno de los sofás- No quería llegar a estos extremos, pero es necesario, ella se ha portado muy mal con mi pareja y sus amigos, paso de insultos a golpes, pero lo que pasó ayer cruzo la raya.

-¿Qué hizo mi hija?- Para la mujer Glimmer no era una santa, se pasaba desperdiciando el dinero que le daban, haciendo lo que quería pues pensaba que podía salirse con la suya. Angella y su esposo sabían que era en parte su culpa y desde hace tiempo estaban planeando un castigo ejemplar, solo estaban esperando algo para justificarlo.

Adora le explicó detalladamente lo que paso en la fiesta, siempre atenta a las reacciones de la madre de su amiga. Angella no podía estar más enojada, una cosa era tirar el dinero y otra cosa era casi ser la causante de la muerte de alguien, la Glimmer de la que le hablaba Adora distaba mucho de la niña que ella crío, aquella niña alegre y amable con alto sentido de justicia.

-Gracias por contarme esto- Habló Angella al final del relato- Lo mínimo que puedo hacer por esa chica es pagar la cuenta de hospital. déjame sus datos y del hospital y me encargo de eso.

-¿Qué pasara con Glimmer?- Adora estaba un poco preocupada por su amiga.

-De eso nos encargaremos mi esposo y yo, pero es posible que tengamos que pedirte un favor.

-Por eso no se preocupe, la ayudaré en lo que pueda- Adora se movió hasta la puerta principal, tenía que regresar al hospital.

-Muy bien- Angella la acompañó a la puerta, la miró mientras la chica se encaminaba a su coche- Estamos en contacto.

-Hasta pronto.

Ya en el coche Adora le mandó un mensaje a su hermana quien estaba en el hospital como su relevo. Mara le contestó que no había novedades.

La noche fue una pesadilla, pasaron horas hasta que un medico les dio algo de información sobre Catra quien tuvo que ser atendida con urgencia pues el cuchillo casi rozó un órgano. El doctor les dijo que tuvo mucha suerte. No fue hasta las cuatro de la mañana que por fin les dijeron que Catra estaba fuera de peligro, la trasladaron a un cuarto compartido donde la estaban vigilando.

Los amigos de Catra seguían en el hospital, ninguno de ellos se fue del hospital. Adora tampoco quería, pero no se vio con otra opción, así que llamó a su hermana quien estuvo de acuerdo con ir en su lugar, ella también estaba molesta con Glimmer por lo que causó pues le tenía cariño a su cuñada.

Cuando Adora volvió a entrar al hospital se encontró a sus amigos regados en la sala de espera. Se habían apoderado de una de las esquinas; Doppler estaba repartiendo cafés y pan para todos, Perfuma abrazaba a Scorpia quien estaba nerviosa, tomando el café que le dio Doppler. Lonnie caminaba por el área soltando groserías.