TRES.

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Louis se despierta esa mañana soleada de un buen humor, se sentía bastante cómodo y relajado en la cama. Además estaba disfrutando de un refrescante olor que había en el aire. Abre sus ojos lentamente tratando de que no los lastime el sol, cuando los abre por completo se encuentra al alfa roncando suavemente a su lado. Louis lo mira un momento pasivamente, hasta que empieza a mover sus extremidades, es que se da cuenta que lo tenía apresado en sus brazos. A Louis se le sube la sangre a la cara cuando ve que su pierna y su brazo izquierdo están encima del alfa además el otro alfa estaba totalmente acurrucado en él. ¿¡Cómo demonios habían llegado a esta posición!?

Louis se zafa rápidamente tratando de no despertar a H y se levanta de la cama, en este momento por la sorpresa ya había espabilado y estaba con los nervios de punta. Por si fuera poco se da cuenta que el olor que había en la habitación era el de H y él mezclados. Se avergüenza y oculta su rostro entre sus manos, porque momentos antes estaba oliéndolo como si nada.

Deja a H dormir unos momentos más y va hasta el baño para echarse agua fría en la cara, debía dejar de preocuparse por estupideces que no significaban nada. Absolutamente nada.

Necesitaba una ducha y un cambio de ropa. Tendría que volver a casa de su tío por ella, por suerte el hombre nunca se encontraba en la casa los días de la semana ya que trabajaba desde muy temprano. Luego de pasarse por la casa, también más tarde iría a trabajar y al final ayudaría a H a encontrar algo sobre él.

Sale del baño y se encuentra a su prima al salir del baño, no le sorprende ya que había sentido su olor momentos antes, le da un saludo con la cabeza y también una sonrisa nerviosa.

—Hey Lou—Olivia dice felizmente. Posteriormente se le acerca ligeramente al cuello, haciendo que el alfa de dos pasos atrás. —Hueles raro—musita finalmente con el ceño fruncido.

— ¿Raro? ¿Huelo mal?—pregunta tratando de olerse a sí mismo, el no sentía ningún olor extraño proveniente de él.

—No, no. Solo diferente.

Louis frunce la nariz confundido y la omega simplemente se encoge de hombros para dirigirse a la cocina. Suspira y camina hasta el cuarto de vuelta encontrándose a H despierto mirando fijamente a la pared.

—Hey.

El alfa voltea a verlo y le da una sonrisa de lado.

—Buenos días

—Prepárate tenemos muchas cosas que hacer hoy.

— ¿Ah sí? ¿Qué haremos?

—Primero volveremos a casa de mi tío—Louis ve al alfa fruncir el ceño ligeramente con molestia. — No te preocupes él no estará ahí. —Lo tranquiliza. —Luego yo tendré que ir a trabajar mientras tú esperaras por mí y luego trataremos de encontrar algo sobre ti.

H asiente, pero no se ve muy conforme.

— ¿De qué trabajas?—solicita saber.

—Hmm, no es exactamente un trabajo fijo, son trabajos que hago cuando me salen, es difícil encontrar un trabajo estable en este pueblo y más si no sabes hacer nada— contó algo desanimado.

— ¿Y qué es lo que haces?—inquiere curioso.

—A veces si tengo suerte consigo trabajo como albañil. Ocasionalmente soy chófer, hago viajes de noche por la carretera para transportar alimentos, a veces si alguien necesita pintar su casa yo puedo hacerlo.

El alfa lo mira sorprendido

—Puedes hacer muchas cosas—dice seguro.

—Bueno... No realmente. Siempre fracaso en la mayoría de trabajos, es por eso que mi tío se molesta conmigo cuando no llevo dinero a la casa.

There's No Place Like Home [Larry Stylinson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora