TRECE: FINAL.

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El celo de ambos termino después de un día entero, los dos alfas lo único que habían hecho las horas anteriores, era haber comido lo poco en había en el apartamento, ir al baño y luego volvían a la cama de nuevo.

Eran las cinco de la tarde ya, los dos estaban recostados en la cama no queriendo salir de ahí por nada del mundo, la habitación se sentía tan cálida e intima, el lugar estaba completamente cubierto por el aroma de los dos; Louis incluso pensó con cariño, que el olor nunca podría irse de lo intenso que era, y le gustaba de esa forma, que solo estuviera el de H y él, se sentía tan especial.

Después de haberse enlazado, todavía no venia el arrepentimiento a ninguno de los dos alfas, ni siquiera pensaron muy bien en lo que habían hecho, solo que se sentía bien y correcto, que era lo que debía pasar en ese momento.

Louis suelta un suspiro feliz y acaricia el cabello de su alfa, que estaba recostado en sus pecho tarareando una canción que él no conocía.

— ¿H? —habla en voz baja el pequeño alfa para no perturbar el ambiente tan agradable.

— ¿Hmm? —completamente somnoliento Harry contesta, estaba cansado de las emociones del momento y también de toda la acción que tuvieron.

—Te amo—le confiesa.

Harry parpadea, y le mira con los ojos brillantes de emoción

—Yo también te amo y te adoro—dice devuelta, abrazándolo amorosamente con sus brazos.

Louis sonríe, y siente a su lobo bailar con felicidad.

Después de un rato en silencio, donde Louis se la paso mirando por el gran ventanal que daba una hermosa vista a la ciudad y estuvo escuchando la ligera respiración de H, se le vino un pensamiento a la mente que le hizo fruncir el ceño algo preocupado.

— ¿H, estas dormido? —murmura.

—Casi—responde con un puchero, Louis se ríe, pero luego traga saliva al pensar en lo que esta a punto de preguntar.

—Tú dijiste que la avioneta en que viajabas ese día empezó a tener fallos...—suelta de la nada.

No habían hablado de ese tema desde que H recupero su memoria, sabía que el alfa había estado resolviéndolo todo, pero casi no había comentado nada con él.

—Sí...—responde dudoso.

—Pero, ¿por qué? ¿Qué sucedió? —cuestiona Louis elevando un poco la voz.

—No lo sé... realmente todo paso muy rápido—responde tranquilo mientras pasa una mano por el estomago descubierto de Louis para calmarlo un poco.

— ¿No crees...? ¿No crees que alguien la manipulo o algo? —sugiere Louis.

— ¿Qué estas diciendo?

Harry frunce el ceño, y levanta la cabeza para mirar los ojos azules de su compañero.

—Bueno, tu hermano...—comienza Louis, pero su alfa lo interrumpe.

—Alto ahí—ordena, un poco molesto, luego suspira negando con la cabeza. —Escucha Louis, entiendo a lo que quieras llegar, ¿sí? —murmura. —Pero creo que la avioneta solamente empezó a tener fallos por si misma, tal vez un error de mantenimiento, que se yo, sé que mi hermano no es muy agradable, y que parece que me odia, pero él nunca llegaría a hacer algo como eso...

—Pero Harry—intenta Louis hablar de nuevo.

—No alfa, por favor dejemos el tema ¿sí? —pide seriamente.

Louis resopla un poco y asiente, deja el tema hasta ahí, no quería hacer enojar a H. Se acomoda mejor en la cama, con el alfa esta vez a su lado, y los dos se duermen después de aspirar el olor del otro.

There's No Place Like Home [Larry Stylinson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora