EPÍLOGO.

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— ¡Liam! ¡Liaaaam! ¡¿Donde rayos estas?! —grita un Louis con los nervios en punta por no poder encontrar a su primo por ningún lado.

—Ya voy, ya voy—responde el alfa calmado, su voz se escuchaba un poco lejana, pero Louis sabía que estaba cerca y que se estaba escondiendo de él.

Liam se para en frente de Louis con una pose despreocupada y una mirada repleta de indiferencia, mientras este, lo miraba de brazos cruzados y con las cejas alzadas en incredulidad.

— ¿Se puede saber que estás haciendo? ¿¡Por qué rayos estas tan tranquilo!? —exclama el pequeño alfa a punto de arrancarse los pelos, al ver a Liam no poniéndose en movimiento.

¡De hecho tenia la camisa manchada! Seguro había estado en la cocina, tragándose la comida como siempre.

— ¿Y por qué tu estas tan desquiciado? ¿Puedes calmarte? ¿Quieres que llame a Harry para que te ayude a calmarte? —pregunta burlón.

— ¡No me pidas que me calme! —enloquece Louis. — ¡Anda y cámbiate la camisa! —le ordena señalándole el cuarto de empleados. — ¡Es la inauguración de mi restaurante! ¿Cómo quieres que no enloquezca? ¡Y tú no estas haciendo nada para ayudarme!—dice moviendo su pierna izquierda sin parar, queriendo agarrar a Liam y zarandearlo para que reaccione. — ¡Y no llames a Harry! Ya lo moleste demasiado a noche—dice cuando ve a Liam a punto de sacar su teléfono celular.

—Ugh, no quiero los detalles...—ríe Liam con una mueca, luego suspira para mirar a Louis con una sonrisa sincera. —Relájate Louis, todo saldrá bien—sonríe, y le pasa un brazo por los hombros del alfa mas pequeño.

—No puedo calmarme, estoy tan nervioso, quiero que todo salga perfecto.

—Todo será perfecto—dice Liam con confianza. —Mas te vale que te calmes, no quieres asustar a tu alfa. Además mira a tus empleados, parecen que están a punto de tener una crisis nerviosa por culpa de tus gritos.

Louis hace una mueca al ver que tiene razón, les da una sonrisa que intenta ser tranquila y luego camina junto a Liam a la cocina, para beber un vaso de agua.

No sabía que tenía tanta sed hasta que se lo bebió.

— ¡¿Dónde rayos esta Harry?! —lloriquea, cuando se siente de nuevo desesperado, su olor volviéndose mas fuerte y espeso a cada minuto.

Liam frunce un poco la nariz y se posiciona a su lado. El lobo de Louis molesto porque no tenia a su alfa cerca, estaba revolviéndose en su pecho.

—Ya llegara, recuerda que fue a traer a su madre.

Louis asiente firmemente tratando de calmarse, no necesitaba a Harry en el día más importante de su vida. ¡Para nada!

Hace más de un año que había venido a Los Santos con el alfa, y se habían enlazado, todo había ido perfecto desde esa vez, bueno casi todo. De no ser por el odioso omega Charlie, todo hubiera sido más que perfecto, cuando el omega se entero que Harry lo había marcado, se volvió un poco loco, y se puso como una furia, parecía que quería asesinar a Louis, no quería abandonar la casa del alfa, donde vivía la mamá de Harry, y ella no podía soportarlo más, así que lo echo.

El omega había intentado demandar a Harry, lo cual había sido una completa estupidez, los fiscales sabían eso, así que rechazaron la denuncia de inmediato, después de eso, el omega se fue sin dejar ningún rastro, dejando a Harvey un poco destrozado, Louis sintió algo de lastima por el hermano de su alfa, parecía realmente enamorado de ese omega, lo cual Louis aun no entendía el porqué. Ese omega era una cosa seria.

Bueno, después de eso, todo fue bien, a Harry le iba muy bien en su trabajo e incluso se hacia mas millonario cada día.

Después de enlazarse, Louis se sentía un poco incomodo de vivir en la misma casa que la madre del alfa, así que H al ver la situación le propuso vivir juntos en su departamento, lo cual Louis no pudo negar, la mamá de H había aceptado, aunque se veía bastante renuente de dejar ir a su hijo, pero de todos modos, no odiaba a Louis por alejarle de su hijo, mas bien lo adoraba como su yerno.

There's No Place Like Home [Larry Stylinson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora